La COAG como problema
Los d¨ªas 4 y 5 de abril, la Coordinadora de Agricultores y Ganaderos (COAG), organizaci¨®n sindical que se reclama progresista, cubr¨ªa el hueco entre la pasada manifestaci¨®n de la agrupaci¨®n de derechas Ufade-J¨®venes Agricultores y la gran movida de esta ¨²ltima convocada y desarrollada en Madrid. Para evitar que decayese la estrategia de la tensi¨®n que se pretende llevar al campo, el 14 de abril realizaba la COAG una nueva manifestaci¨®n en Zaragoza, con motivo de la luego frustrada visita del ministro de Agricultura, Carlos Romero, a esta ciudad. A partir de estos hechos el autor reflexiona sobre la actitud de la COAG.
El origen aparente del proceso movilizador de COAG era la defensa de una tabla reivindicativa de 29 puntos, dirigida al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentaci¨®n (MAPA) el 28 de febrero pasado, resumida finalmente en los siguientes temas: descuentos sobre el gas¨®leo a realizar directamente en poste, 14 pagas para los jubilados del r¨¦gimen especial agrario de la Seguridad Social, supresi¨®n de las jornadas te¨®ricas a efectos de c¨®mputo para las cotizaciones a la Seguridad Social, negociaci¨®n global de la fiscalidad agraria y adopci¨®n de medidas para adecuar las estructuras productivas agrarias a la Comunidad Europea (CE).Lo primero que salta a la vista es que la mayor parte de ese cuadro reivindicativo, que en alg¨²n punto es respetable, dif¨ªcilmente puede considerarse como de pol¨ªtica agraria, competencia del MAPA, aunque pueda afectar a los agricultores como ciudadanos e incluso como colectivo diferenciado de la sociedad.
Salvo que consideremos al MAPA como supremo gestor de todas las facetas de la vida rural, adem¨¢s de las espec¨ªficamente productivas, a cuyos efectos ser¨ªa necesario asignarle competencias, desde funciones tan as¨¦pticas como la sanidad, hasta el orden p¨²blico y la lucha contra el delito en el medio rural, es evidente que no puede responsabilizarse al citado ¨®rgano de la Administraci¨®n de los temas Fiscales o de Seguridad Social.
En este sentido, dirigir los tiros contra el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentaci¨®n a estos efectos supone que los promotores de la protesta o no se enteran de lo que pasa o utilizan criterios de agitaci¨®n viciados desde el origen, en el m¨¢s torpe estilo demag¨®gico.
Reivindicaciones
Del precedente cuadro reivindicativo s¨®lo un tema es de directa responsabilidad del MAPA: la preparaci¨®n de las estructuras productivas y transformadoras de la agricultura espa?ola ante el ingreso en el Mercado Com¨²n. Y aqu¨ª, sin ocultar la existencia de problemas y cuestiones a¨²n no resueltas, dif¨ªcilmente puede negarse que las principales tareas administrativas, desde la regulaci¨®n de mercados al tema de estructuras, han sido acometidas en tiempo y forma, en el espacio r¨¦cord de tres a?os, y en medio de las ingentes tareas, con disfunciones inevitables, que conlleva la construcci¨®n de un nuevo Estado.
Otra cosa es que una herencia de siglos, condicionada por fen¨®menos naturales e hist¨®ricos, y ¨²ltimamente por la crisis econ¨®mica, pueda modificarse radicalmente en 36 meses. Los agricultores de este pa¨ªs han mostrado sobradamente su dinamismo y capacidad de adaptaci¨®n durante el ¨²ltimo trienio, pero no puede ped¨ªrseles, ni la Administraci¨®n socialista es capaz de forzar a golpe de decreto y gesti¨®n cortoplacista, que borren de un plumazo los condicionantes negativos de una realidad econ¨®mica y cultura cristalizada durante tantos a?os.
Una gran parte de los dirigentes de la Coordinadora de Agricultores y Ganaderos son conscientes de los l¨ªmites, objetivos y subjetivos existentes para una transformaci¨®n inmediata y radical del medio rural espa?ol y del esfuerzo realizado a escala de la Administraci¨®n, para hacerlo viable en el menor tiempo posible, que en cualquier caso siempre ser¨¢n bastantes a?os.
No ignoran, igualmente, que las razones aducidas como justificaci¨®n de la protesta carecen en el contexto, la forma y el momento en que se han presentado, del rigor y seriedad necesarios para superar el calificativo del pretexto. No obstante, han lanzado a la Coordinadora de Agricultores a un proceso abierto de confrontaci¨®n con el Gobierno socialista, y cabe preguntarse acerca del significado pol¨ªtico y las razones que explican este comportamiento que est¨¢ llevando la COAG.
En relaci¨®n con lo primero, la pr¨¢ctica actual del COAG supone la integraci¨®n subordinada de esta organizaci¨®n en el proyecto pol¨ªtico de la derecha pol¨ªtica y sindical agraria. Esta ¨²ltima necesita cubrirse ante la opini¨®n p¨²blica espa?ola con la falsa especie de que "el campo", sin adjetivaciones, est¨¢ enfrentado al Gobierno socialista.
Relev¨¢ndose en la protesta con la correa de transmisi¨®n de la derecha en el campo, la Coordinadora de Agricultores y Ganaderos concede la coartada necesaria para que esa especie pueda parecer veros¨ªmil, y la declaraci¨®n de alguno de sus dirigentes de que ellos est¨¢n "en contra de los sindicatos de la derecha" no pasa de ser un sarcasmo.
Error hist¨®rico
La raz¨®n m¨¢s inmediata de ese error hist¨®rico, cuyos netos y directos beneficiarios van a ser precisamente "los sindicatos de derecha", en contra de los cuales la coordinadora dice estar, responde a una estrategia que pretende encontrar en la acci¨®n callejera una garant¨ªa de futuro para la COAG, que sus dirigentes entienden amenazado y que de ser as¨ª revelar¨ªa -y el cambio de t¨¢ctica permitir¨ªa camuflar al mismo tiempo- su incapacidad para consolidarlo durante tres a?os de pr¨¢ctica reivindicativa "pac¨ªfica".
El catalizador del proceso ha sido el injusto veto puesto al ingreso de COAG en el COPA, instituci¨®n que agrupa a todas las patronales y sindicatos agrarios representativos de la Comunidad Europea (CE), por la organizaci¨®n de derechas Uni¨®n de Federaciones Agrarias de Espa?a-J¨®venes Agricultores.
?sta es una maniobra de tenaza cuyo objetivo ¨²ltimo es, sin duda, desgastar al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentaci¨®n y al Gobierno socialista, y en cuya prosecuci¨®n, como hemos visto, participa alegremente la coordinadora.
Como trasfondo ¨²ltimo del problema, al margen de los vientos electorales que corren, se encuentra la contradicci¨®n, no resuelta por la COAG, que se arrastra desde hace tres a?os, entre la realidad y el deseo, y la consiguiente incapacidad para vertebrar su pr¨¢ctica reivindicativa en el campo espa?ol de acuerdo con el principio de la realidad, cuya asunci¨®n hubiera exigido cambios organizativos, e incluso personales, que s¨®lo parcial e insuficientemente han tenido lugar en el seno de la coordinadora durante los ¨²ltimos tiempos.
Si a ello a?adimos el bloque de filias y fobias -sobre todo lo ¨²ltimo- que caracteriza a algunos l¨ªderes de importantes uniones sindicales, empe?ados en ver gigantes donde s¨®lo suele haber molinos -y dej¨¢ndose escapar, tan perspicaces quijotes, a los aut¨¦nticos endriagos- tendremos el ¨²ltimo ingrediente, el factor humano, que proporciona gran parte de las claves para entender el actual proceso.
La sujeci¨®n enajenada a la magia del debe ser, sobre todo durante el primer a?o de Gobierno socialista, ha sido claramente negativa para la COAG, y cabe temer que nuevamente est¨¦ informando su l¨ªnea pol¨ªtica y reivindicativa, con nefastas consecuencias para el futuro de esta organizaci¨®n agraria, y de la opini¨®n progresista en el campo espa?ol, al margen de espejismos de coyuntura que s¨®lo una visi¨®n miope puede ver como el camino para llegar a la perfecci¨®n.
Fuerzas de izquierdaNo obstante ser¨ªa injusto y pol¨ªticamente equivocado no ver en los problemas de la Coordinadora de Agricultores y Ganaderos (COAG) otra cosa que sus propias insuficiencias y errores -pol¨ªticos, organizativos y personales-, as¨ª como la, por otra parte, evidente y leg¨ªtima actuaci¨®n en su seno de otras fuerzas pol¨ªticas de izquierda.
En estos momentos, urge una reflexi¨®n profunda en la fuerza hegem¨®nica de la izquierda espa?ola acerca de cu¨¢l puede o debe ser el modelo sindical agrario a aplicar en el campo espa?ol. De la respuesta que se d¨¦ a esa tarea, que es tarea de partido y no de Administraci¨®n, van a deperider muchas cosas en el medio rural en un pr¨®ximo futuro.cb0
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