El Ayuntamiento de Santander investigar¨¢ si la Polic¨ªa Municipal maltrat¨® a un profesor

El Ayuntamiento de Santander, en sesi¨®n celebrada el pasado jueves, acord¨® por unanimidad que la Comisi¨®n Municipal de Polic¨ªa lleve a cabo una investigaci¨®n sobre los presuntos malos tratos de que fue objeto el catedr¨¢tico de Ciencias Ricardo Garc¨ªa Moro, agredido el mi¨¦rcoles, seg¨²n sus declaraciones, en el cuartelillo de la Polic¨ªa Municipal.

Profesionales de la ense?anza en cuadrados en diversos sindicatos han denunciado la que califican como brutal agresi¨®n, mientras los socialistas aseguran que "Santander asiste bajo la autoridad de un alcalde extremista de la m¨¢s pura derecha a c¨®mo se violenta la libertad de integridad f¨ªsica de un ciudadano por el mero hecho de tocar el clax¨®n de un autom¨®vil". El alcalde, Juan Hormaechea, ha mostrado su firme decisi¨®n de esclarecer los hechos.Ricardo Garc¨ªa Moro, de 40 a?os, casado, catedr¨¢tico de Ciencias en el instituto Marqu¨¦s de Santillana de Torrelavega, formul¨® denuncia por agresi¨®n contra la Polic¨ªa Municipal de Santander. Asegura que, en la tarde del mi¨¦rcoles, se dirig¨ªa hacia el centro de la qapital en su coche, con su mujer, cuando un motorista de la polic¨ªa municipal que le preced¨ªa hizo una extra?a maniobra y estuvo a punto de atropellarle.

El profesor afirma: "Poco despu¨¦s, los dos agentes vinieron a pedirme la documentaci¨®n, que les mostr¨¦. Me llevaron luego al cuartelillo y all¨ª, entre los dos, me propinaron una brutal paliza, de la que me duele todo el cuerpo, la cara, las costillas, los genitales... El ojo izquierdo no puedo todav¨ªa abrirlo. No s¨¦ qu¨¦ denuncia, habr¨¢n presentado contra m¨ª, tal vez hablen de desacato, qu¨¦ s¨¦ yo. El forense, cuya presencia requiri¨® el comisario de polic¨ªa, habr¨¢ tomado buena nota de cu¨¢l era mi estado. Y tambi¨¦n los testigos de mi detenci¨®n, quienes, espont¨¢neamente, acudieron a declarar en mi defensa". Garc¨ªa Moro asegura que en el interior de las dependencias municipales se cruz¨® con el alcalde de la ciudad -extremo confirmado por algunas personas- a quien, pidi¨® ayuda. "Pudo ver mi cara hinchada y ensangrentada y lo que me contest¨® fue que para ayudarme estaba la Polic¨ªa Municipal", a?ade el catedr¨¢tico.

Discrepancias

Tal declaraci¨®n del denunciante no es coincidente con el informe que la Polic¨ªa Municipal ha remitido a la alcald¨ªa en relaci¨®n con los hechos. Los agentes dicen que la recepci¨®n de una orden por la emisora les oblig¨® a cambiar, repentinamente, el sentido de su marcha sin alterar para nada la circulaci¨®n". El ocupante, del coche S-1845-I (Ricardo Garc¨ªa Moro) hizo sonar el claxon y accion¨® las luces delanteras como protesta mientras "su discriminaci¨®n por la maniobra efectuada era acompa?ada de gestos". Seg¨²n los polic¨ªas, fue invitado a detenerse, a lo que se neg¨®.Seg¨²n el informe policial, la persecuci¨®n del automovilista se inici¨® entonces por las calles que conducen al centro mientras aquel efectuaba bruscos virajes. Sospechando que pudiera hallarse bajo los efectos del alcohol, la polic¨ªa dice que le invit¨® a someterse a una prueba para salir de dudas. Nueva hu¨ªda y nuevos golpes de volante, seg¨²n los agentes, se sucedieron hasta que el conductor fue reducido en la plaza de Alfonso XIII donde se concentraron numerosas personas.