El Consejo del Poder Judicial expulsa de la carrera a los dos magistrados implicados en el 'caso Bardellino'
El pleno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) acord¨® ayer, por unanimidad, sancionar a los magistrados Jaime Rodr¨ªguez Hermida y Ricardo Var¨®n Cohos con la separaci¨®n de la carrera judicial, por su implicaci¨®n en la puesta en libertad del jefe de la Camorra napolitana Antonio Bardellino. Ambos fueron absueltos la semana pasada por la Sala Segunda del Tribunal Supremo. Precisamente ayer el pleno del consejo rechaz¨® por 11 votos contra 9 la propuesta de cinco vocales de pedir al fiscal que investigue la posible acci¨®n penal contra los tres jueces que acordaron la absoluci¨®n.
El presidente de la comisi¨®n disciplinaria del Consejo, Pablo Garc¨ªa Manzano, explic¨® ayer el motivo de la sanci¨®n es que ambos magistrados han incurrido en falta muy grave. Tal falta consiste en las presiones ejercidas por Rodr¨ªguez Hermida, a las que no se resisti¨® Var¨®n Cobos, para la puesta en libertad del mafioso italiano. fin concreto, la falta muy grave en la que, seg¨²n el Consejo, incurrieron los dos magistrados fue la. prevista en el art¨ªculo 417.2 de la ley org¨¢nica del Poder Judicial (LOPJ), de 1 de julio de 1985: "La intromisi¨®n, dirigiendo ¨®rdenes o presiones de cualquier tipo, en la aplicaci¨®n o interpretaci¨®n de las leyes que corresponda a cualquier otro ¨®rganoo jurisdiccional".La aplicaci¨®n de esta norma, no vigente en el momento en que ocurrieron los hechos que dieron lugar al expediente disciplinario, sella producido seg¨²n lo establecido en la disposici¨®n transitoria 10 de la LOPJ, por ser m¨¢s favorable que la tipificaci¨®n de los hechos que figuraba en la ley de 1870, y siempre de acuerdo con los dos expedientados. En el caso de Rodr¨ªguez Hermida, que, seg¨²n la propia sentencia absolutoria, rog¨® a Var¨®n Cobos que concediera la libertad a Bardellino, la figura de las presiones aparece con claridad. En cambio, en el caso de Var¨®n Cobos, que acord¨® la libertad provisional del mafioso, en algunos medios jur¨ªdicos; se consideraba m¨¢s dif¨ªcil la existencia de la falta muy grave.
Planteada esta objeci¨®n al presidente de la comisi¨®n disciplinaria. del Consejo, Garc¨ªa Manzano explic¨® que la conducta de Var¨®n Cobos incurr¨ªa en la misma falta "desde dos puntos de vista: por no oponer resistencia a las presiones recibidas y porque, de acuerdo con los datos que figuran en el expediente disciplinario [que coinciden sustancialmente con los que consideraron probados los dos magistrados que suscribieron un voto particular contra la sentencia absolutoria], en la fecha en que se dict¨® el auto de libertad provisional el se?or Var¨®n Cobos no se encontraba ya en funciones en el juzgado central de instrucci¨®n n¨²mero 5, por haber regresado su titular y haberle manifestado por tel¨¦fono que se hac¨ªa cargo del juzgado".
Por lo dem¨¢s, seg¨²n Garc¨ªa Manzano, jur¨ªdicamente no existe contradicci¨®n entre la sentencia del Supremo y la resoluci¨®n sancionadora del Consejo: entre otras razones, porque la propia sentencia que absolvi¨® a los dos magistrados se?al¨® que ello se acordaba "sin perjuicio de poder ser exigidas las responsabilidades disciplinarias; a que hubiere lugar". Garc¨ªa.Manzano explic¨® que el enjuiciamiento penal de unos hechos nada tiene que ver con "la depuraci¨®n de una conducta profesional de un magistrado, en su calidad de funcionario p¨²blico". Sin embargo, subsisten dudas en el Consejo sobre cu¨¢l ser¨¢ el momento en que la sanci¨®n acordada ayer adquiera firmeza y, por lo tanto, sea ejecutiva y los dos magistrados sancionados abandonen definitivamente la carrera judicial. Los sancionados pueden interponer un recurso de reposici¨®n ante el Consejo y, si ¨¦ste es rechazado, el contencioso-administrativo ante la sala correspondiente.
La credibilidad en los jueces
Sobre el problema que plantear¨ªa a los ciudadanos, mientras que se produce la firmeza de las sanciones, la credibilidad en la justicia administrada por magistrados sancionados por el m¨¢ximo ¨®rgano de gobierno del poder judicial, Garc¨ªa Manzano se?al¨® que la posibilidad de "negociar" con los afectados sobre su apartamiento provisional de la funci¨®n judicial no est¨¢ prevista en la ley. Sin embargo, manifest¨® que, dado que los dos magistrados tendr¨¢n que solicitar formalmente su reincorporaci¨®n, el Consejo decidir¨¢ en ese momento sobre el particular.
Cinco vocales del Consejo judicial -Jos¨¦ Luis Calvo Cabello, Cristina Alberdi, Ignacio de Otto, Emilio Berlanga y Valent¨ªn de la Iglesia- propusieron ayer al pleno que se dirigiera al ministerio fiscal, para que investigue las posibles acciones penales contra los tres magistrados que absolvieron a Rodr¨ªguez Hermida y Var¨®n Cobos. El pleno estudi¨® la propuesta, que fue apoyada por otros cuatro vocales y rechazada por 11 votos contra 9.
Antes de dar cuenta de los acuerdos del pleno, Juan Jos¨¦ Mart¨ªnez Zato, portavoz del Consejo, pronunci¨® unas palabras emocionadas y afectuosas hacia la persona del presidente del Consejo, Antonio Hern¨¢ndez Gil, v¨ªctima reciente de un atentado terrorista frustrado.
El pleno design¨® por unanimidad magistrado del Tribunal supremo y jefe del servicio de inspecci¨®n del CGPJ a Ignacio Sierra y Gil de la Cuesta. Tambi¨¦n design¨® magistrados del Tribuinal Supremo a Marino Baribera Santos, por el turno de juristas de reconocido prestigio, y a. Francisco Javier Delgado Barrio, por el de especialistas de lo, contencioso-administrativo. Igualmente, nombr¨® a Juan Saavedra Ruiz presidente de la Audiencia Provincial de Vitoria.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.