Cortarle la cabeza a Fraga, "un error"
Manuel Fraga se mir¨® la corbata, de grandes y complicados dibujos blancos y azules: "Es la t¨ªpica corbata que te aconsejan que no te pongas en una campa?a", dijo a los periodistas que le rodeaban. "Pero a m¨ª me gusta". En esta ocasi¨®n, los expertos vigilan m¨¢s que antes la imagen de Fraga ante esta campa?a, probablemente m¨¢s decisiva para ¨¦l que para ninguno de los otros candidatos a la jefatura del Gobierno. Responsables de la campa?a de Alianza Popular en las elecciones de octubre de 1982 reconocieron que fue "un error", subsanado s¨®lo en parte y ya en la recta final, publicar una gran fotograf¨ªa de Fraga en la que se hab¨ªa cortado la parte superior de la cabeza.
La imagen del candidato resulta esencial dentro de una campa?a: "En el elector, que es un indeciso inconsciente, la fotograf¨ªa de la persona tiene una importancia tremenda", opina Lorente. Por ello, la beatifica fotograf¨ªa de Felipe Gonz¨¢lez, mirando hacia el cielo azul y prometiendo cambio, tuvo un gran impacto; no en vano una norma cl¨¢sica de la publicidad asegura que "no hay nada m¨¢s dram¨¢tico que el primer plano de una cara". Gabriel Gim¨¦nez, que en 1982 consumi¨® dos d¨ªas en sesiones fotogr¨¢ficas con el candidato Gonz¨¢lez, opina que el actual presidente del Gobierno "no es f¨¢cil de fotografiar, no le gusta". Pero una vez metidos en ello, "tiene una buena cara".
Jam¨¢s se la han retocado, asegura Gim¨¦nez; ni siquiera cuando, con la campa?a Cien a?os de honradez, apareci¨® por primera vez con las sienes plateadas: "No le pintamos canas para que pareciese un ejecutivo; simplemente, aquellas canas ya estaban all¨ª y, al parecer, nadie se hab¨ªa dado cuenta".
En todo caso, aquella campa?a, realizada en blanco y negro y con constantes recordatorios sobre la "firmeza" de los socialistas, "asust¨® un poco al elector", admite Gim¨¦nez. En lo referente a corbatas, Lorente discrepa de las teor¨ªas cl¨¢sicas de los asesores de imagen: "Da lo mismo la corbata que te pongas; lo importante es que el candidato se sienta c¨®modo en su traje, que jam¨¢s ofrezca sensaci¨®n de agobio o de cansancio. Un gesto cansado hace que la gente desconf¨ªe de un candidato que aparece tan vulnerable".
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