M¨¦xico, agobiado por su deuda externa, marca distancias con la pol¨ªtica de la OPEP

M¨¦xico, que mantiene desde hace cuatro a?os el estatuto de observador ante la Organizaci¨®n de Pa¨ªses Exportadores de Petr¨®leo (OPEP), ha comenzado a marcar distancias con respecto al c¨¢rtel petrolero, y en una decisi¨®n dif¨ªcil de explicarse ha renunciado esta vez a enviar un delegado a las discusiones de la 78? conferencia ministerial del consorcio que se celebra en Brioni (Yugoslavia).

Algunos delegados de la OPEP consideran que los problemas de la deuda externa de M¨¦xico figuran a la cabeza de las prioridades del Gobierno mexicano, que habr¨ªa elegido mostrar una cara m¨¢s amable a sus acreedores occidentales, a fin de obtener concesiones tangibles, aunque ello suponga dar un portazo moment¨¢neo a sus viejos amigos de la otrora poderosa organizaci¨®n exportadora.Sea como fuere, el Gobierno mexicano ha iniciado en los ¨²ltimos meses lo que algunos interpretan puede ser un cambio dr¨¢stico en sus pol¨ªticas petrolera y econ¨®mica. En el plazo de los tres ¨²ltimos meses, el presidente De la Madrid ha sustituido a los titulares de dos de los departamentos ministeriales claves de su Gabinete.

En marzo pasado, el secretario de la Energ¨ªa, Francisco Labastida Ochoa, dimiti¨® para presentarse a las elecciones del Estado de Sinaloa. Fue sustituido por Alfredo del Mazo, ex gobernador del Estado de M¨¦xico, un economista de reconocido prestigio, ya que muchos analistas mexicanos consideran el tapado de Miguel de la Madrid para sustituirle en la Presidencia en 1988.

Relevo de Herzog

Hace menos de dos semanas, Silva Herzog fue reemplazado en la secretar¨ªa de Finanzas, acusado impl¨ªcitamente de estar entregado a las exigencias de los grandes bancos norteamericanos, los principales acreedores de M¨¦xico. Su sustituto es Gustavo Petriccoli, ex director de Nacional Financiera, la entidad bancaria encargada de propulsar el desarrollo en M¨¦xico. La gran tarea de Petriccoli ser¨¢ manejar el drama de la deuda .Las primeras declaraciones y las incipientes actitudes que han dejado traslucir los nuevos ministros son significativas a la hora de hacer un an¨¢lisis sobre por d¨®nde puede discurrir la nueva pol¨ªtica petrolera mexicana y la vinculac¨ª¨®n que muchos pretenden hacer de ¨¦sta con la estrategia del pago de la deuda exterior, que actualmente supera ya los 97.700 millones de d¨®lares, cerca de 14 billones de pesetas.

Aparte de no asistir a las reuniones de la OPEP (en Brioni se ha dicho que no se ha invitado a ning¨²n productor independiente, sin hacer distinciones de que M¨¦xico manten¨ªa la situaci¨®n de observador desde hace cuatro a?os), tambi¨¦n el nuevo ministro de Finanzas ha iniciado su andadura con algunas declaraciones explosivas de por d¨®nde puede ir su estrategia.

El pasado lunes, Gustavo Petriccoli declar¨® que M¨¦xico no podr¨¢ pagar su servicio de deuda exterior (unos 12.000 millones de d¨®lares al a?o, m¨¢s de 1,7 billones de pesetas al cambio actual) hasta que los precios del petr¨®leo no comiencen a recuperarse en los mercados internacionales. En otras palabras, los acreedores no cobrar¨¢n ni siquiera los intereses de la multimillonaria deuda mexicana hasta que el pa¨ªs azteca no ingrese m¨¢s dinero por su pr¨¢cticamente ¨²nica fuente de ingresos exteriores: el petr¨®leo.

En un acontecimiento paralelo, indudablemente vinculado al comienzo de la reuni¨®n de la OPEP en Brioni, el Gobierno norteamericano ha anunciado su decisi¨®n de incrementar durante el mes de junio las compras de crudo mexicano con destino a la reserva estrat¨¦gica estadounidense.

El aumento en un mill¨®n de barriles de las adquisiciones habituales que previamente hab¨ªan sido pactadas entre M¨¦xico y Estados Unidos con destino a dicha reserva estrat¨¦gica puede ser solamente un gesto simb¨®lico, de escasa trascendencia econ¨®mica, pero la coincidencia del anuncio de esta decisi¨®n con el inicio de la reuni¨®n de Brioni ha dado buenos indicios de que la Administraci¨®n estadounidense se presenta en ¨²ltima instancia como el baluarte final que evitar¨¢ el default (falta de pago) de M¨¦xico ante sus compromisos de pago exteriores, una situaci¨®n que, de producirse, significar¨ªa un golpe de incalculables consecuencias para la gran banca norteamericana, lo que, naturalmente, explica a su vez el inter¨¦s que la Casa Blanca dedica a la salud financiera (le M¨¦xico.

Algunos delegados a la conferencia del cartel exportador, al ser interrogados por la ausencia mexicana, resaltan lo que ellos creen son correlaciones evidentes en estas decisiones. Lo mismo sucede con los traders de petr¨®leo internacionales, que, sacando conclusiones de la pol¨ªtica de ventas de crudo que sigue M¨¦xico, se?alan que bastar¨ªa con que el precio del crudo subiera unos dos o tres d¨®lares por encima de los niveles actuales para que M¨¦xico viera alejarse, aunque s¨®lo fuera moment¨¢neamente, el grave riesgo que corre de suspender los pagos del servicio de su deuda exterior.

Seguridad nacional

El pa¨ªs azteca produce 2,7 millones diarios de barriles de crudo, de los que 1,5 millones van destinados a las ventas exteriores en lo que se conoce corno plataforma de explotaci¨®n. Seg¨²n analistas mexicanos, esta plataforma de exportaci¨®n es considerada en el pa¨ªs azteca como una cuesti¨®n pr¨®xima a la seguridad nacional, en el sentido de que no debe ser modificada por entenderse que es el l¨ªmite m¨¢ximo de pago al exterior que puede permitirse esta naci¨®n en desarrollo.Las ventas de crudo mexicanas son bastante estables, al margen de ciertas interrupciones en espera de ajustes en los precios, y van destinadas fundamentalmente a Estados Unidos (800.000 barriles diarios), Espa?a (250.000 barriles), Israel (50.000 barriles) y varios pa¨ªses centroamericanos. Sus ingresos exteriores, por tanto, son igualmente bastante estables y, pese a suponer pr¨¢cticamente m¨¢s del 80% del total los que proceden de las ventas del crudo, van destinados pr¨¢cticamente en su totalidad al pago del servicio de la deuda.

Esta es la raz¨®n que explica que, en unos momentos en que la baja del precio del crudo ha reducido sus ingresos exteriores, el Gobierno de De la Madrid haya podido comprender que es m¨¢s rentable mirar en estos momentos hacia el Norte, en espera de concesiones de sus obligaciones de pago, que buscar una provocaci¨®n participando en una reuni¨®n de productores de petr¨®leo que busca subir el precio del crudo.