Los pa¨ªses del GATT discrepan sobre una mayor libertad para el comercio mundial

Numerosas diferencias exist¨ªan todav¨ªa ayer entre los pa¨ªses del Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio (GATT) en las dos negociaciones paralelas que est¨¢n llevando a cabo los 91 pa¨ªses que lo integran: la renovaci¨®n del acuerdo multifibras (AMF), que regula todos los intercambios textiles mundiales, y el lanzamiento de una nueva ronda de negociaciones comerciales multilaterales. La nueva ronda, solicitada por Estados Unidos en 1982, est¨¢ siendo apoyada actualmente por un elevado n¨²mero de pa¨ªses.

Las exigencias norteamericanas se basan en el incremento del proteccionismo y de las pr¨¢cticas irregulares que se est¨¢n extendiendo en el panorama del comercio internacional, aunque, parad¨®jicamente, sea Estados Unidos uno de los pa¨ªses que ¨²ltimamente recurre a medidas proteccionistas con mayor asiduidad. Tanto el acuerdo para relanzar la nueva ronda de conversaciones multilaterales como el multifibras deb¨ªan ser adoptados antes del 31 de julio.En el apartado de la nueva ronda de negociaciones multilaterales, y para cumplir con los compromisos temporales, el comit¨¦ preparatorio ha optado por elaborar una propuesta de declaraci¨®n, abanderada por Suiza y Colombia, en la que se incluyen las cuestiones sobre las que no se ha conseguido un consenso, fundamentalmente agricultura, servicios y textiles, de forma provisional (hay casi 40 apartados entre par¨¦ntesis), para que sean los ministros quienes se encarguen de discutir en Punta del Este (Uruguay), el pr¨®ximo d¨ªa 15 de septiembre, de qu¨¦ forma se pueden solucionar. En el fondo, lo que han hecho los expertos, ante la falta de tiempo y la dificultad de encontrar mayores aproximaciones, es pasarles la patata caliente a los ministros para que sean ellos quienes lo resuelvan.

Esta propuesta de declaraci¨®n que se discutir¨¢ en la localidad uruguaya pretende ser un consenso de las tres posiciones que han estado sobre el tapete hasta ahora: la de Colombia y Suiza, en nombre de un total de 20 pa¨ªses, partidaria de una mayor liberalizaci¨®n en diversos campos, como el de los servicios, la agricultura o los textiles, entre otros, y las de los pa¨ªses englobados en la EFTA y la CE m¨¢s Estados Unidos y Jap¨®n.

Si la propuesta en cuesti¨®n fuera aprobada, supondr¨ªa para numerosos pa¨ªses quedarse sin protecci¨®n aduanera y abrir las puertas para numerosos productos procedentes de otros pa¨ªses con mano de obra m¨¢s barata. Un temor que tienen, entre otros, las autoridades espa?olas. Otras nueve naciones presentaron otra propuesta, partidaria de llegar a un acuerdo a toda costa a nivel internacional, en tanto que otro grupo de 10 pa¨ªses, entre los que se encuentran Brasil, la India y Yugoslavia, no desean que se produzca mayor apertura ni en los servicios ni en la propiedad intelectual ni que sea tratado en el seno del GATT la liberalizaci¨®n de inversiones.

La soluci¨®n por la que parece que se va a optar es utilizar esta f¨®rmula abstracta de recoger en una sola declaraci¨®n, de forma provisional -por eso aparecen entre par¨¦ntesis-, los apartados sobre los que a¨²n no hay acuerdo para que a nivel ministerial se les pueda dar una soluci¨®n. Algo que, en cualquier caso, no parece f¨¢cil. Lo m¨¢s probable es que estos aspectos se discutan posteriormente por separado.

Subgrupo de trabajo

Por el momento, ya se ha formado un subgrupo de trabajo para dar salida a las divergencias que subsisten en el terreno agr¨ªcola. Diferencias que incluso enfrentan a algunos de los pa¨ªses desarrollados. Aqu¨ª, la Comunidad Europea, y particularmente Francia, choca frontalmente con Estados Unidos.

Seg¨²n reconoc¨ªan fuentes del GATT, el n¨²cleo sobre el que gira este problema es, b¨¢sicamente, el de saber si van a seguir manteni¨¦ndose las subvenciones a la agricultura. Una cuesti¨®n con un peso espec¨ªfico muy importante para muchos pa¨ªses y sobre el que los comunitarios, especialmente los galos, no parecen dispuestos a transigir.

En cuanto al acuerdo multifibras, los pa¨ªses que han mantenido una mayor dureza, entre los que se encuentran India y Brasil y los del Extremo Oriente, parec¨ªan en las ¨²ltimas horas haber suavizado sus posiciones, lo que permitir¨¢ renovar el AMF.

Estos pa¨ªses exportadores en v¨ªas de desarrollo han intentado asimismo que se concretara en el marco del acuerdo el porcentaje de crecimiento anual de sus exportaciones (pidieron un 5%), eliminando los mecanismos que puedan impedir ese crecimiento. Hasta ahora, estas naciones pueden exportar un 6% m¨¢s cada a?o, pero en algunos casos los importadores pueden congelar ese aumento.

La CE desea, para prevenir entradas legales de textiles, que en el marco del acuerdo se regulen m¨¢s detalladamente las reglas de origen que deben cumplir los productos importados.