Los gases t¨®xicos mataron a 177 mineros en Sur¨¢frica
ENVIADO ESPECIAL Ciento setenta y siete mineros murieron asfixiados y 235 resultaron heridos el martes tras un incendio registrado a dos kil¨®metros de profundidad en la mina Kinross, situada en la localidad de Evander, en pleno Transvaal, a unos 100 kil¨®metros al este de Johanesburgo. Los gases t¨®xicos causaron la muerte de los mineros, seg¨²n fuentes de la compa?¨ªa propietaria. Este es el peor desastre ocurrido en una mina de oro surafricana, justamente cuando la capital industrial y econ¨®mica de Sur¨¢frica celebra los 100 a?os de su fundaci¨®n y del descubrimiento del oro en el Transvaal. Otros siete mineros no hab¨ªan sido encontrados ayer despu¨¦s de una noche de horror en la mina Kinross.
Los portavoces de la mina expresaron su pesimismo sobre la posibilidad de hallarlos con vida. De las 177 v¨ªctimas mortales que hab¨ªan sido contadas hasta primera hora de la tarde (hora peninsular espa?ola), 172 eran trabajadores emigrantes negros y los otros cinco blancos. El accidente es el peor que se registra en una mina de oro y el segundo en importancia en la historia minera del pa¨ªs.La mayor tragedia afect¨® a una mina de carb¨®n, Clydiesdale, en la localidad de Coalbrook, en la provincia de Natal, en 1960. En aquella ocasi¨®n 435 mineros murieron como consecuencia de una gigantesca avalancha en el interior del pozo minero.
Dirigentes del Sindicato Minero del Carb¨®n, encabezados por su carism¨¢tico l¨ªder, Cyril Ramaphosa, se trasladaron a la mina para realizar una investigaci¨®n sobre el terreno y, posteriormente, el sindicato, autorizado hace unos pocos a?os y que agrupa a 130.000 mineros negros, hizo p¨²blico un comunicado en el que ped¨ªa al Gobierno el nombramiento de una comisi¨®n de encuesta para establecer el grado de seguridad en la industria minera.
"El desastre nos hace retroceder a los peores tiempos y de muestra claramente los niveles de seguridad, inaceptablemente bajos, que se practican en la industria minera sura.fricana", dec¨ªa el comunicado. Por su parte, un portavoz del gigantesco complejo minero Gencor manifest¨® que la compa?¨ªa estaba por delante de otras en cuanto a niveles de seguridad se refer¨ªa.
El incendio comenz¨® a las 9.30 (8.30, hora peninsular espa?ola) del martes y, seg¨²n un portavoz de la mina, poco despu¨¦s las llamas y los gases t¨®xicos se hab¨ªan extendido por las galer¨ªas del inmenso complejo subterr¨¢neo, a unos dos kil¨®metros de profundidad. Los gases t¨®xicos se extendieron por una superficie de unos 50 kil¨®metros.
El director de la mina, Kobus Olivier, manifest¨® a los periodistas que todas las muertes fueron causadas precisamente por los gases t¨®xicos y no por el fuego. "Si no hubiera sido por los gases, no habr¨ªa habido ninguna p¨¦rdida de vidas humanas", dijo. "La ¨²ltima persona con vida fue localizada a las ocho de la noche [del martes] y no somos optimistas con relaci¨®n a las posibilidades de encontrar con vida a los perdidos", a?adi¨®.
En el hospital de Evander 52 blancos recibieron asistencia, aunque parec¨ªa que ninguno ten¨ªa heridas graves. En el hospital cercano de Winkelhaak otros 183 mineros negros estaban "bajo observaci¨®n". Al iniciarse el fuego, 2.400 mineros se encontraban en el interior de la mina, de los que 2.200 fueron evacuados despu¨¦s de varias horas de intensas operaciones de rescate. Seg¨²n explic¨® Olivier en una conferencia de prensa, el accidente se inici¨® al prenderse fuego un cilindro de gas. El fuego se extendi¨® a los cables y otros materiales de la galer¨ªa. Los gases t¨®xicos proced¨ªan, seg¨²n el director, de una sustancia que se utiliza en las paredes de los t¨²neles para evitar la corrosi¨®n.
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