Purificaci¨®n Garc¨ªa,

la modista que protagoniz¨® uno de los desfiles estrella en La Semana de Moda de Madrid, pas¨¦ m¨¢s apuros de los habituales en la presentaci¨®n de pasarelas por culpa del malentendido de un guarda de seguridad. Hab¨ªa encargado a una florister¨ªa quince quentias para adornar la pasarela. Como horas antes del desfile las plantas segu¨ªan sin llegar, advirtieron al guarda para que estuviera atento y comunicara con urgencia el momento de su llegada. Minutos antes del desfile, un coche oficial de La Zarzuela aparc¨® en la entrada principal del sal¨®n. Antes de identificar a sus pasajeros, el guarda, en un lapsus linguae, olvid¨® el nombre de las flores y advirti¨® a los organizadores que hab¨ªan llegado las "infantas". El revuelo que se arm¨® entre los encargados del desfile, Javier Escobar y Cuca Solana, ante lo que imaginaban inesperada visita de sus altezas reales Elena y Cristina, fue antol¨®gico. Los segundos pasaron, se improvis¨® un nuevo protocolo y cuando todos se dispon¨ªan a recibir a las infantas lo que apareci¨® fueron las quentias, pero tarde para ser lucidas en la pasarela.