Foreman: "Siempre he sospechado de los creadores"

Richard Foreman, de 49 a?os, uno de los nombres de la vanguardia teatral estadounidense de finales de los sesenta, acude por primera vez a Espa?a. Esta noche presenta, en el Festival de Oto?o de Madrid, Afrcanis instructus, una comedia musical creada en colaboraci¨®n con el compositor Stanley Silverman. El espect¨¢culo es el resultado de la colisi¨®n de su personalidad con la del m¨²sico, seg¨²n Foreman, quien afirma: "Siempre he sospechado de loscreadores".

Este polifac¨¦tico personaje, que en 19 a?os ha realizado 45 montajes, nunca ha abandonado el teatro de texto, a pesar de haber entrado de lleno en el campo del teatro visual. Ahora se encuentra interesado por la poes¨ªa contempor¨¢nea. "Es mi forma de hacer teatro en oposici¨®n a la novela, en un momento de vac¨ªo de la literatura dram¨¢tica", asegura.No le gusta el p¨²blico, ni el teatro, ni se encuentra interesado por ning¨²n movimiento esc¨¦nico actual, aunque reconoce que le puede gustar gente como los estadounidenses Woostek Group o aceptar el valor de' cierto teatro europeo como el de Giorgio Strelher. "Siempre he sospechado del arte y de los creadores, empezando por m¨ª, y no estoy seguro de si hacer teatro o arte es una forma de escapar. S¨®lo nos dedicamos a intentar dibujar c¨®mo ser¨ªamos mejores, a pintar modelos para no ser los seres aburridos que somos, en vez de ser mejores directamente".

A pesar de que su teatro ha sido considerado un arte intelectual influido por diversas corrientes filos¨®ficas, Foreman tal y como ocurre en Africanis instructus, refleja un gran humor e iron¨ªa en sus obras, de la misma forma que hablando puede observarse toda su lucidez. Al encontrarse en Espa?a. se ve obligado a confesar su gran admiraci¨®n por Jos¨¦ Ortega y Gasset, de quien conoce su obra: "En la Universidad ten¨ªa un profesor hispanista que me dio a conocer a Ortega, y a trav¨¦s de ¨¦l me introduje en todas las corrientes filos¨®ficas europeas".

Africanis instructus, estrenada en Nueva York en marzo de este a?o, es una de las obras m¨¢s queridas por Foreman. "La tengo especial cari?o, y aunque no es especialmente representativo de mi trabajo habitual, nadie m¨¢s que yo, podr¨ªa haber hecho este tipo de obra. No entra dentro ole lo que he venido haciendo en los ¨²ltimos 18 a?os, sino que es m¨¢s asimilable para el p¨²blico", precisa Foreman.

Colisi¨®n de mundos

Para Foreman, trabajar con Silverman, compositor experimental y vanguardista con quien ha realizado otros siete montajes, es especialmente interesante. "Es mucho m¨¢s rom¨¢ntico que yo, y quiz¨¢ lo interesante del montaje sea la colisi¨®n entre nuestras dos personalidades. Es como si yo fuera el duro, el intelectual, el serio, y Silverman incorpora una m¨²sica de mediados de siglo, tranquila, con lo que intentamos presentar la colisi¨®n entre los dos mundos y entre nuestras dos personalidades".Africanis instructus no es, seg¨²n Foreman, tan vertiginoso como otros montajes suyos, en los que intenta crear una estructura tan complicada y r¨¢pida que no se puede ver todo lo que est¨¢ pasando al mismo tiempo, "aunque lo que no se consigue ver llega a trav¨¦s del subconsciente, y eso me satisface. Trata de todas las cosas extra?as y malas que ocurren hoy en el mundo".

Director y fundador del Ontological-Hysteric Theater, ha realizado con este grupo unas 20 obras experimentales y de investigaci¨®n, aunque declara ser un cl¨¢sico que tambi¨¦n hace teatro comercial.

Hombre influido por Bertolt Brecht desde los 15 a los 32 a?os, se cans¨® del autor alem¨¢n, y durante seis a?os recibi¨® influencias, fundamentalmente en el texto, de la estadounidense Gertrude Stein.

Cuando se le pregunta si ¨¦l es, ha sido o ser¨¢ vanguardia, comenta ir¨®nicamente: "Para hacer publicidad pol¨¦mica, s¨ª; pero, en el fondo, nunca pienso eso cuando trabajo y nunca he intentado provocar". Y comenta que es dif¨ªcil que su teatro sea considerado rompedor, como suced¨ªa a finales de los sesenta.

Para Foreman, Africanis instructus es probablemente la ¨²nica comedia del mundo inspirada en Claude L¨¦vi-Strauss, y en ella se ve c¨®mo los contrastes entre las diferentes culturas es cada vez menor. "Mi obra representa el cambio de siglo durante la colonizaci¨®n del ?frica negra", concluye.