Euskadi invertebrada
La sociedad vasca, paralizada por la falta de comunicaci¨®n
Si el di¨¢logo resulta tan dificil es porque ya se considera establecido que cada cual -es decir cada grupo; el individuo vale lo que el grupo en que se embosca- habla un lenguaje propio, en clave no compartible.La gente se ha acostumbrado ya a contemplar c¨®mo el discurso del otro es bruscamente interrumpido mediante la exclusi¨®n autom¨¢tica o la eliminaci¨®n fulminante. Por eso es tan dif¨ªcil entenderse. "ETA es una organizaci¨®n dialogante, democr¨¢tica y combativa", proclama Txomin Ziluaga (de HB) en un mitin. El mismo d¨ªa, desde las p¨¢ginas del diario del PNV, alguien muy representativo del sector de la poblaci¨®n con tendencia a identificarse con los que mandan se mofa de KoIdo M¨ªtxelena tach¨¢ndole de hombre-anuncio. KoIdo Mitxelena, m¨¢xima autoridad mundial en filolog¨ªa vasca, militante nacionalista desde su adolescencia, condenado a muerte por Franco, secretario del l¨ªder nacionalista Juan de Ajuriaguerra en la clandestinidad, probablemente el m¨¢s prestigioso intelectual con que jam¨¢s haya contado el nacionalismo vasco.
Pero en la reciente crisis del PNV se ha inclinado del lado de Carlos Garaikoetxea, e incluso ha participado en una manifestaci¨®n contra la manipulaci¨®n informativa denunciada por los trabajadores de la radiotelevisi¨®n vasca. Luego se le excluye: ahora no es m¨¢s. que un triste hombre-anuncio, un payaso encartelado, un don nadie.
Yoyes era una hero¨ªna. Pero se traicion¨® a s¨ª misma, rompi¨® los votos, decidi¨® vivir su vida, tuvo un hijo. "Su presencia en la calle", han escrito los presos de ETA, sus ex compa?eros, en el m¨¢s escalofriante documento producido por esa organizaci¨®n, equival¨ªa a proclamar que la lucha armada ya no es necesaria". Eso es lo ¨²nico que no puede ser puesto en cuesti¨®n, luego merec¨ªa morir. Pero ETA es una organizaci¨®n dialogante y democr¨¢tica y, por tanto, el asunto merece ser considerado con ponderaci¨®n, como hace un cura desde la revista de los cl¨¦rigos y ex cl¨¦rigos abertzales en su ¨²ltimo n¨²mero: analizar los pros y los contras, el debe y el haber, para concluir con un piadoso "descanse en paz Yoyes Gonz¨¢lez Catar¨¢in" (no sin antes haber pronosticado que aqu¨ª "va a haber le?a para rato". Lo mismo quela semana pasada garantiz¨® I?aki Esnaola, de HB, en su debate radiof¨®nico con Garalkoetxea).
"Si ganan los socialistas se demostrar¨¢ que el estatuto no sirve para nada", ha opinado el mismo Esnaola, cabeza de lista de HB por Guip¨²zcoa. Pero el que encabeza la del PNV por Vizcaya ha pronosticado que si Benegas es el pr¨®ximo lendakari -es decir, si los vascos votan de manera diferente a como deben- Euskadi puede "pasar hasta hambre". Y un editorial de Deia advierte que "votar a Garaikoetxea es votar a Benegas, porque el l¨ªder de Eusko Alkartasuna quita votos al nacionalismo". Con lo que queda cerrado el c¨ªrculo. El estatuto s¨®lo sirve si nos sirve, es deicir, si sirve para que sigamos mandando nosotros.
Ayer se mataba en nombre de la independentzia; hoy se hace en el de la autodeterminaci¨®n o la negociaci¨®n. Pero ?qu¨¦ tiene que ver con esas palabras la portuguesa asesinada en San Sebasti¨¢n? El encapuchado que sali¨® la semana pasada en la televisi¨®n francesa lo dej¨® claro: "Nuestra organizaci¨®n ya ha advertido a la poblaci¨®n que se mantenga alejada de nuestros objetivos". Luego la culpa es de la portuguesa, de la ni?a que jugaba a la puerta de un cuartel, de los que pasean por la Avenida un s¨¢bado por la ma?ana. Pero no s¨®lo de ellos. "La responsabilidad ¨²ltima", a?adi¨® el encapuchado, "corresponde a nuestros enemigos por pyotegerse tras los civiles".
Por lo dem¨¢s, "a Felipe Gonz¨¢lez", puede leerse en el editorial de la revista de los curas abertzales, "le gusta jugar con ventaja. Su corrupci¨®n y la de sus fieles lacayos ser¨¢ juzgada por la historia, as¨ª como su responsabilidad en que la paz no llegue ma?ana misrno". Porque, adem¨¢s, ya ha escrito el te¨®rico abertzale Jokin Apalategui que "el prototipo del actor social de la violencia pol¨ªtica en el Pa¨ªs Vasco es normalmente el habitante m¨¢s entregado y solidario de toda la cornunidad". Y a mayor abundamiento, Xabier Arzalluz, presidente del PNV, ya advirti¨® que "ETA quiere negociar y Madrid no", y que, en ¨²ltimo t¨¦rmino, "Madrid se ?mpone por las armas".
En un mitin del PSOE en San Sebasti¨¢n, una docena de j¨®venes objetores son literalmente molidos a palos por los asistentes cuando intentan desplegar carta con sus reivindicaciones. El orador les califica de "fascistas". La explicaci¨®n a posteriori es ¨¦sta: "Cre¨ªamos que eran de HB". Una concejala socialista de Bilbao explica el conflicto escolar del barrio bilba¨ªno de San Ignacio con estas palabras.: "En las ikastolas se ense?a a los ni?os a gritar ETA, m¨¢talos".
?Cu¨¢l es, entonces, el nivel de acuerdo posible, a partir de qu¨¦ valores compartidos construir una comunidad? Porque si Mitxclena es un hombre-anuncio, Oteiza un renegado, Unamuno y Baroja malos vascos, Onaind¨ªa un vendido, Meabe un no-vasco y la ikastola una academia de terroristas, ?en qu¨¦ sistema de ideas y creencias apoyar un proyecto de convivencia en com¨²n?
El fracaso
La ausencia de vertebraci¨®n pol¨ªtica, manifestada en la existencia de tantos partidos irreconciliables y de instituciones p¨²blicas que compiten entre s¨ª, es un reflejo del fracaso del proyecto de construcci¨®n nacional que ha hegemonizado el partido que ha gobernado Euskadi desde 1980. Pero tambi¨¦n de la desvertebraci¨®n social. A?o y medio lleva la Universidad sin ser capaz de elegir un rector. Los sindicatos se ven si.stem¨¢ticamente desbordados; y que unos huelguistas prendan fuego a un tren (300 millones de p¨¦rdidas) casi no es noticia. La junta directiva de la patronal vasca lleva un a?o sin reunirse porque no se ponen de acuerdo sobre la representaci¨®n de los organismos provinciales.El sistema de ense?anza se apoya en la existencia de tres redes escolares independientes entre s¨ª: los colegios privados, la escuela p¨²blica y las ikastolas. Mientras tanto, m¨¢s del 50% de los j¨®venes menores de 25 a?os est¨¢ en el paro, y Euskadi avanza con paso firme hacia la total ruina econ¨®mica. Sin el acceso al mercado espa?ol, la econom¨ªa vasca lograr¨ªa alcanzar en un tiempo r¨¦cord un nivel de desarrollo comparable al de Zambia. Pero en los m¨ªtines se sigue hablando de los derechos hist¨®ricos, de la soberan¨ªa originaria, de la bota de Madrid, de la independentzia. Se secuestra y se mata en nombre de palabras, y en nombre del verbo se dispensa el crimen.
Pero si alguien afirma que la situaci¨®n es desastrosa, se le mira como a un elemento disolvente, un infiltrado del enemigo. En un poema estremecedor, el escritor Jon Juaristi ha propuesto esta explicaci¨®n: "Nuestros padres mintieron".
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