Congreso sobre la evoluci¨®n art¨ªstica y pol¨ªtica de Castelao
La figura pol¨ªtica y art¨ªstica del galleguista Alfonso Daniel Rodr¨ªguez Castelao (Rianxo 1886-Buenos Aires 1950) es el objetivo del congreso que sobre el autor de Sempre en Galiza se est¨¢ desarrollando en Santiago de Compostela hasta el pr¨®ximo d¨ªa 29, con la asistencia de medio millar de personas. Fue convocado por la fundaci¨®n del mismo nombre del homenajeado, la Universidad de Galicia y la Xunta, con motivo de haber declarado esta ¨²ltima 1986 como a?o de Castelao al cumplirse el centenario de su nacimiento.El congreso gira en torno a dos aspectos fundamentales, la vida, la evoluci¨®n ideol¨®gica y la pr¨¢ctica pol¨ªtica por un lado y, por otro, la creaci¨®n art¨ªstica. Los promotores de esta reuni¨®n pretenden, en este sentido, superar viejas pol¨¦micas -alimentadas por el partidismo ideol¨®gico y cierta dosis de ignorancia- y determinar si a Castelao se le debe concebir como un artista o como un pol¨ªtico, as¨ª como el contenido concreto de su nacionalismo, dada su evoluci¨®n ideol¨®gica. "Fue las dos cosas", apunta el catedr¨¢tico Ricardo Carballo Calero. "Cualquier divisi¨®n que se haga es puramente metodol¨®gica", precisa.
Concepci¨®n de Galicia
Para este profesor, que pronunci¨® la conferencia inaugural, su dimensi¨®n pol¨ªtica fue tal que si "Castelao no hubiese existido, Galicia, tal como la concebimos hoy, tampoco podr¨ªa vivir". A ¨¦sto, el presidente de la Xunta, Gerardo Fern¨¢ndez Albor a?adi¨® que es "la conciencia pol¨ªtica" de la comunidad aut¨®noma, aunque actu¨® en las ant¨ªpodas ideol¨®gicas del primer mandatario gallego.Casi 100 comunicaciones y cuatro ponencias se leer¨¢n a lo largo de esta semana. La transformaci¨®n ideol¨®gica de Castelao y la concreci¨®n de su proyecto pol¨ªtico para Galicia son los puntos m¨¢s atractivos que se han debatido. El historiador Jos¨¦ Antonio Dur¨¢n se?al¨® que el paso del conservadurismo al nacionalismo radical "fue muy propio de la evoluci¨®n ideol¨®gica de la ¨¦poca". Para Dur¨¢n, la implantaci¨®n de la segunda Rep¨²blica removi¨® las conciencias de los intelectuales y pol¨ªticos espa?oles, acerc¨¢ndolos a los problemas reales.
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