El 50 % de las ventas en librer¨ªas se ha trasladado a los grandes almacenes
Los grandes almacenes se ven obligados a aumentar el espacio que dedican a los libros, mientras que las librer¨ªas mantienen su negocio, mal que bien, ayud¨¢ndose con la venta de cuadernos y bol¨ªgrafos. Seg¨²n los datos del Instituto Nacional del Libro, la mitad de las ventas de librer¨ªas las acaparan los grandes almacenes. Estos enormes centros comerciales que conquistan las ciudades espa?olas tienen adem¨¢s una oferta tan variada que no defraudar¨¢ al lector exigente.
Los datos facilitados por el INLE se refieren s¨®lo a los libros vendidos en librer¨ªas, ya que hay un importante mercado que no pasa por ellas, como el de las ventas a domicilio o el de exportaci¨®n (Espa?a exporta anualmente la tercera parte de su producci¨®n editorial, lo que equivale a cerca de 12.000 millones de pesetas). Dentro de este mercado interno de venta directa, El Corte Ingl¨¦s es el primer vendedor de libros de Espa?a, seg¨²n asegura un portavoz de los grandes almacenes, que no quiso precisar el volumen total de ventas de esta cadena.La industria editorial espa?ola es compleja debido al elevado n¨²mero de novedades que se lanzan al mercado (35.000 t¨ªtulos anuales) y al escaso nivel de lectura y, por tanto, de venta. Una cadena de restaurantes cuya principal ventaja es la de dar comidas hasta las tres de la madrugada puso en marcha la idea de poner a sus puertas una peque?a tienda. Los Vips, que as¨ª se llama la cadena, vend¨ªan en sus locales revistas y alg¨²n que otro libro s¨®lo de modo experimental. Hoy en d¨ªa, sus secciones de librer¨ªa son de las m¨¢s rentables de sus tiendas, por lo que han tenido que ir concedi¨¦ndoles m¨¢s espacio.
"?ste es un fen¨®meno internacional que en Espa?a tiene una caracter¨ªstica muy peculiar" dice Rafael Mart¨ªnez Al¨¦s, director del Instituto Nacional del Libro (INLE). "En los grandes almacenes espa?oles no s¨®lo puedes comprar las novedades y los best-sellers, sino que tambi¨¦n encuentras libros realmente de calidad, incluso especializados; libros que en ocasiones resulta dif¨ªcil encontrar en una librer¨ªa al uso".
D¨¦bil estructura
Seg¨²n un estudio realizado recientemente por la Federaci¨®n de Asociaciones Nacionales de Distribuidores de Ediciones (FANDE), "la d¨¦bil estructura de las librer¨ªas se confirma con que el 66,77% de ellas tienen un volumen de ventas brutas anuales de menos de 10 millones de pesetas. Contrastan las grandes librer¨ªas, ya que un 15,65% tiene unas ventas brutas de m¨¢s de 26 millones al a?o". Sin embargo, s¨®lo la cadena de restaurantes Vips tiene unas ventas anuales de libros de unos 300 millones de pesetas (los directivos de esta cadena estaban esta semana evaluando los datos y no han facilitado resultados definitivos).
"Muchas librer¨ªas se mantienen porque son negocios familiares", dice Alberto Rodr¨ªguez de Rivera, secretario de la Confederaci¨®n Espa?ola de Gremios y Asociaciones de Libreros (CEGAL). "Nuestro problema fundamental es el escaso h¨¢bito de lectura de este pa¨ªs". Seg¨²n las cifras que maneja el Ministerio de Cultura, s¨®lo el 46% de los espa?oles lee libros, lo que quiere dec¨ªr que m¨¢s de la mitad no est¨¢ dispuesta a comprar un libro aunque ¨¦ste le asalte camino del filete con patatas.
Parece en todo caso que los grandes almacenes no han creado un nuevo p¨²blico lector, sino que son los lectores habituales los que han cambiado, simplemente, de costumbres. Porque un gran almac¨¦n tiene la ventaja de que igual te vende un libro que un calcet¨ªn y, adem¨¢s, casi a cualquier hora del d¨ªa. En los Vips, por ejemplo, el horario es de nueve de la ma?ana a tres de la madrugada y abre los siete d¨ªas de la semana. Los niveles de ventas suben durante los fines de semana. Igualmente pasa en el resto de los grandes espacios de venta, como El Corte Ingl¨¦s, donde la compra de libros aumenta un 25% durante los viernes y s¨¢bados.
La agresividad comercial de los grandes almacenes se pone tambi¨¦n al servicio del libro. Si se muere Gerald Brenan, los estantes exhiben inmediatamente un amplio surtido de escritos del hispanista brit¨¢nico. Si hay una novedad, un gran almac¨¦n la tendr¨¢ y, adem¨¢s, si le es posible, llevar¨¢ al autor para que le firme su ejemplar. Los niveles de lectura en Espa?a siguen casi estancados; hace diez a?os le¨ªa libros el
36% de los espa?oles. El IVA, aplicado desde el 1 de enero del pasado a?o, ha frenado el consumo de libros entre un 5% y un 10%, seg¨²n datos facilitados por la Confederaci¨®n de Libreros. Todo ello no evita que los grandes almacenes conozcan incrementos anuales en la venta de libros de hasta el 25% con respecto al a?o precedente.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.