Siguen los saldos
El Reino Unido es, con frecuencia, a" causa de no se qu¨¦ enrevesados convenios de producci¨®n, un plat¨® estadounidense metido sin aduana en la Comunidad Econ¨®mica Europea. Me cuentan que, por ejemplo, una producci¨®n multinacional, La misi¨®n, el a todos los efectos una pel¨ªcula de nacionalidad brit¨¢nica y que no hay para ella ning¨²n filtro que le impida disfrutar en la Europa comunitaria de los mismos derechos -y unos pocos m¨¢s, derivados del poder de su distribuci¨®n muliinacional- que cualquier producci¨®n francesa, italiana o realmente brit¨¢nica. Y ah¨ª est¨¢ la cuesti¨®n: ?Todas las pel¨ªculas que se producen en el Reino Unido son realmente brit¨¢nicas o las hay norteamericanas disfrazadas? Que d¨¦ la respuesta quien pueda darla.Decisi¨®n final es una coproducci¨®n brit¨¢nico-canadiense. Es probablemente, como producto, inofensivo y no tiene trampa bajo el cart¨®n, pero la verdad es que se ajusta como anillo al dedo al modelo epid¨¦mico de pel¨ªculas de relleno, de saldo y de lote, a que hicimos alusi¨®n recientemente en estas p¨¢ginas: una nader¨ªa, un filme de tercera clase que pese a su mediocridad, y tal vez a causa de ella, ocupa en Espa?a salas de proyecci¨®n, fechas de estreno y horas de proyecci¨®n que de esta manera son indirectamente robadas al buen cine que deja de proyectarse en nuestras pantallas precisamente por esa falta de sitio del que se benefician engendrillos como ¨¦ste, nadie sabe por que.
Decisi¨®n final
Director: Sheldon Larry. Canadiense brit¨¢nica, 1986. Int¨¦rpretes: Joe Spano, Diane Venora y David Mac Callum. Estreno en el cine Imperial.Armados y peligrosos Director: Mark Lester. USA, 1986. Int¨¦rpretes: John Candy, Eugene Levy, Robert Loggia. Estreno en los cines Bilbao, Palacio de la Prensa, Princesa, Vel¨¢zquez, Consuladq, Garden, Liceo, Versalles y Victoria. Harvard, movida americana Director: Steve Miner. EE UU, 1986. Int¨¦rpretes: Thomas Howell, Rae Dawn Chong, Leslie Nielsen, James Earl Jones. Estreno en los cines Lope de Vega, Novedades, Picasso y Aluche.
Nada que decir de este filme, como tampoco de Armados y peligrosos, ¨¦ste s¨ª un t¨ªpico producto de lote norteamericano impuesto a las pantallas del mundo -las nuestras, incluidas- por la fuerza de un sistema de distribuci¨®n que en su reparto de frutos nobles adosa a cada uno de estos frutos un lote residual de cinebasura que los exhibidores han de comprar si quieren aqu¨¦l y que, de carambola, los espectadores hemos de tragar aun a costa de envilecer nuestra mirada, no tanto por ver filmes como ¨¦ste como por dejar de ver los que no nos llegan por su causa.
En id¨¦ntica l¨ªnea de distribuci¨®n se encuentra Harvard, movida americana, un est¨²pido t¨ªtulo adulterado -el original es Soul men- que por una vez se acopla a la propia estupidez de lo que enuncia. Pel¨ªcula caser¨ªsima y provincian¨ªsima, puede ser edificante para las familias de los chicos de Oreg¨®n que aspiran a ingresar en la universidad de Harvard, pero que en la actual movida estudiantil espa?ola suena a digresi¨®n marciana. Estos tres estrenos entran en un desolador marco. Un recuento hecho el d¨ªa 6 de este mes en la cartelera de Madrid nos da las siguientes cifras de estrenos: total, 47. De ellos, 28 son norteamericanos, casi dos tercios; siete, espa?oles; cuatro, brit¨¢nicos; cuatro, franceses; uno italiano, y otro alem¨¢n. A?adamos uno m¨¢s canadiense, otro argentino y la cuenta se cierra en disparate aritm¨¦tico.
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