Prohibido acariciarse
En EL PAIS leemos que un chaval fue condenado a cinco meses por acariciarse en p¨²blico con su novia. Debe ser duro, se?or juez, ver a alguien amando abiertamente cuando a uno lo obligaron a esconderse para hacerlo desde siempre. Jur¨ªdicamente, y sin ser ning¨²n experto, me surgen diversas cuestiones. ?C¨®mo es posible que la persona que pone la denuncia y es testigo sea al mismo tiempo la que juzga? ?C¨®mo se puede entender que alguien sufra prisi¨®n preventiva por un delito tal como ese? De la noticia parece colegirse que fue el chico el ¨²nico que termin¨® en la c¨¢rcel. ?Debemos concluir que, en opini¨®n del se?or juez, el sexo es algo que el hombre comete contra la mujer?Un derecho progresista y democr¨¢tico se caracteriza por explicitar lo que est¨¢ prohibido y dejar como permitido todo lo dem¨¢s. Las dictaduras, por lo contrario. Por ello la supervivencia de tipos penales tan flexibles y ambiguos como el de esc¨¢ndalo p¨²blico nos deja inermes ante las iniciativas de iluminados prepotentes como el que nos ocupa. El Estado como tal no tiene por qu¨¦ tener una moral p¨²blica m¨¢s all¨¢ de lo definido como ilegal, por mucho que la mayor¨ªa de los ciudadanos compartan una moral determinada. Igual que ocurre con la religi¨®n. Sin embargo, parece que, al menos en ciertas capas de la sociedad, a¨²n se defiende la pervivencia de dichos tipos penales, que act¨²en como cajones de sastre y permitan reprimir lo que de otro modo resultar¨ªa irreprimible. Escandal¨ªcese ahora a conciencia, se?or juez, pues usted s¨ª que ha cometido un aut¨¦ntico esc¨¢ndalo, p¨²blico y privado, que quedar¨¢ impune, por supuesto.-
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