Los beneficios de Banesto en cinco a?os equivalen al 50% de los intereses cargados a Coca
Los beneficios que reparti¨® Banesto entre los a?os 1979 y 1983 se compusieron, en un 50%, de los intereses cargados a Ignacio Coca, el financiero que se suicid¨® el pasado mes de junio, en el mismo per¨ªodo de tiempo. Repasando las memorias de Banesto de estos a?os, se observa que hay una escasa provisi¨®n de fondos para fallidos en relaci¨®n con la cartera de cr¨¦ditos. Estas afirmaciones se contienen, seg¨²n fuentes cercanas a la familia Coca, en la ampliaci¨®n de la querella contra altos cargos de Banesto por el presunto delito de estafa, presentada el pasado viernes al Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 7 por el abogado penalista de los Coca, Horacio Oliva. Tambi¨¦n se pide en el documento que testifique Juan Herrera, marqu¨¦s de Viesca.
El pasado viernes, el abogado penalista de la familia Coca, Horacio Oliva, present¨® una ampliaci¨®n de la querella criminal contra cuatro altos cargos de Banesto (Pablo Garnica, Jos¨¦ Mar¨ªa L¨®pez de Letona, Jos¨¦ Mar¨ªa Sainz de Vicu?a y Manuel Igea) por el presunto delito de estafa, seg¨²n confirm¨® el propio Oliva a este peri¨®dico. El catedr¨¢tico de Derecho Penal no quiso hacer ning¨²n comentario al contenido del nuevo documento "por respeto a la justicia".Sin embargo, fuentes cercanas a la familia Coca indicaron que la querella se centra en los pactos secretos paralelos a la fusi¨®n de los bancos Coca y Espa?ol de Cr¨¦dito, en c¨®mo afect¨® tal fusi¨®n -positivamente- a la cuenta de resultados de Banesto y en la petici¨®n al juez Gal¨¢n C¨¢ceres de nuevas diligencias, entre las que sobresalen la demanda de testificaci¨®n de Juan Herrera, marqu¨¦s de Viesca (como persona determinante en la fusi¨®n) y del albacea testamentario de Coca, Jos¨¦ Luis Gonz¨¢lez Zald¨²a, que hoy es el consejero delegado de la sociedad Quash-Tierras de Almer¨ªa.
Persona incapaz
Seg¨²n dichas fuentes, la querella pide el procesamiento de los hombres de Banesto por presunto delito de estafa por valorar que se est¨¢ en presencia de una maquinaci¨®n dirigida a una persona incapaz de valorar los t¨¦rminos de cualquier decisi¨®n (Ignacio Coca), que le condujo a una firma de unos compromisos que le perjudicaban y, paralelamente, favorec¨ªan a Banesto. Oliva explic¨® hace varios d¨ªas, cuando preparaba esta querella, que se basaba en un supuesto titulado "circunvenci¨®n de personas incapaces" existente en el Derecho italiano y que se centra en una manipulaci¨®n a un mayor de edad incapaz, con enga?o.La querella pide la ampliaci¨®n de las diligencias a practicar. Entre las nuevas se demanda que declare Manuel Igea, subdirector general de Banesto, que no lo tuvo que hacer en la primera ronda delante del juez; que testifiquen Juan Herrera (consejero de Banesto que, junto con Pablo Garnica llev¨® las negociaciones preliminares de fusi¨®n de los dos bancos); Jos¨¦ Luis Gonz¨¢lez Zald¨²a; Silvia Moroder, viuda de Coca; I?igo Coca, hijo mayor del banquero; el doctor Pozuelo y Alfonso M¨¢rquez Pati?o, amigo personal del suicidado.
Asimismo, requiere a Banesto que certifique la composici¨®n (participaciones accionariales) de su consejo de administraci¨®n durante los a?os 1977 a 1984 y los ejemplares de sus memorias correspondientes a los a?os 1979 a 1985. Tambi¨¦n se pide al Banco de Espa?a un certificado de todas las ayudas prestadas a Banesto con ocasi¨®n de su fusi¨®n con el Banco Coca. Por ¨²ltimo, demanda al juez para que varios expertos financieros precisen las f¨®rmulas utilizadas para la fijaci¨®n de los fallidos y las gestiones realizadas para el cobro de los cr¨¦ditos no, pagados, y estudien las provisiones para insolvencia hechas por Banesto por las deudas de. Coca y sus sociedades, a partir de la contabilidad del banco.
Seg¨²n fuentes cercanas a los Coca, se pide tambi¨¦n al juez que, en el caso de que las provisiones fuesen insuficientes, se determine su repercusi¨®n en la cuenta de resultados de Banesto. Ello justificar¨ªa la versi¨®n de la querella de que desde principios de la d¨¦cada de los a?os ochenta, Banesto tiene dificultades con el Banco de Espa?a por repartir beneficios sin tener suficiente, provisi¨®n para riesgos.
La nueva defensa penal de los Coca deber¨¢ centrarse en los aspectos de falsedad de documento mercantil y usura, admitidos a tr¨¢mite, y en el de estafa si el juez lo considerase conveniente. Las fuentes consultadas indican que Horacio Oliva se basa en que, desde el primer momento de la fusi¨®n de los bancos, toda la operaci¨®n acontece en el contexto de la crisis bancaria, que se llevar¨ªa por delante a la mitad de las marcas del sistema financiero espa?ol.
Conocimiento perfecto
Seg¨²n los Coca, los hombres de Banesto conoc¨ªan perfectamente la situaci¨®n del Banco Coca, pese a los desmentidos de sus hombres m¨¢s representativos, empezando por Pablo Garnica. Pese a que la escritura p¨²blica de fusi¨®n no se firm¨® hasta el mes de septiembre de 1978, desde muchos meses antes los ejecutivos de Banesto estudiaron y controlaron la gesti¨®n del Banco Coca. Primero, a trav¨¦s de las comisiones t¨¦cnicas de ambas partes (en las que estuvo el querellado Jos¨¦ Mar¨ªa Sainz de Vicu?a); posteriormente, y a partir del 2 de enero de 1978, con la presencia constante en la sede central del Banco Coca de dos directivos de Banesto, que vigilaron la marcha de las operaciones y su funcionamiento; m¨¢s adelante, desde abril del mismo a?o, Manuel Igea, persona designada para llegar la direcci¨®n y control del Coca materializa su presencia en esta entidad; por ¨²ltimo, a partir del 1 de junio de 1978, el control del Coca por Banesto es absoluto. Seg¨²n las fuentes citadas, con todo ello quedan desmentidas las declaraciones de Garnica en el sentido de que no pudieron conocer los problemas que exist¨ªan en el Banco Coca.
La ampliaci¨®n de la querella al delito de estafa parece comprender exclusivamente a los dirigentes hist¨®ricos de Banesto por lo que quedar¨ªa excluido de ella Jos¨¦ Mar¨ªa L¨®pez de Letona. Es probable que hoy, el abogado de Banesto, Jos¨¦ Mar¨ªa Stampa pida la exculpaci¨®n definitiva de Letona ante el juez.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.