Dud¨² rindi¨® fidelidad a Hassan II en Rabat

El l¨ªder del colectivo musulm¨¢n de Melilla, Aomar Mohamedi Dud¨²; su cu?ado, Adelaziz Uariachi, funcionario de aduanas marroqu¨ª, y el jefe religioso de dicho colectivo, Sid Driss Abdelkader, rindieron ayer pleites¨ªa y fidelidad al rey Hassan IIe Marruecos, en su doble condici¨®n de jefe de Estado y l¨ªder religioso, en el tradicional acto de La Bayaa, celebrado poco antes de la puesta de sol en la capital marroqu¨ª, Rabat. Terminada la ceremonia, los tres representantes de Melilla saludaron personalmente, en el interior del palacio real, al monarca alau¨ª, a quien besaron la mano.

La televisi¨®n marroqui dio anoche amplia informaci¨®n de esta ceremonia. Durante La Bayaa Dud¨², Abdelkader y Uariachi hicieron las cinco inclinaciones de rigor ante Hassan II, que montaba un corcel negro.La Bayaa es el acto cumbre de la fiesta del trono marroqu¨ª. A ¨¦l acude una amplia representaci¨®n de las 50 prefecturas del reino integradas por notables, diputados, alcaldes y ca¨ªdes y encabezadas por cada gobernador. El rey, generalmente a caballo, va pasando entre sus s¨²bditos y recibe la pleites¨ªa, que consiste en cinco inclinaciones corporales al tiempo que se le expresan, en voz alta y en igual n¨²mero de veces, larga vida, Este acto se renueva todos los a?os.

Los tres representantes de Melilla llegaron sobre las 17.10 al mechuar (explanada) del palacio real de Rabat donde se celebr¨® el acto, justamente diez minutos antes de que apareciese el rey y cuando pr¨¢cticamente estaban ya completas todas las formaciones. Iban guiados por un responsable del Ministerio marroqu¨ª del Interior, que los situ¨® en la segunda formaci¨®n de asistentes, justamente en el lateral enfrente de la tribuna de invitados y ante la c¨¢mara n¨²mero tres de la radiotelevisi¨®n marroqu¨ª. Entre el grupo de Melilla y el secretario del Tesoro norteamericano, James Baker, invitado de honor, hab¨ªa escasamente diez metros.

Dud¨² y Abdelkader se alinearon juntos, mientras que Uariachi, que fue recientemente expulsado de Melilla por cinco a?os y que es descendiente del profeta Mahoma, se situ¨® detr¨¢s. Los tres, que el pasado oto?o visitaron Rabat cuando todav¨ªa Dud¨² trabajaba para el Ministerio espa?ol del Interior, vest¨ªan el mismo atuendo -chilaba blanca que cubr¨ªa el tarbuz, calcetines blancos y babuchas amarillas- que los casi 3.500 asistentes al acto. ?sta es la primera vez que, al menos Dud¨² y Abdelkader, quienes poseen documentaci¨®n espa?ola, prometen fidelidad al rey Hassan II, lo que les convierte autom¨¢ticamente en s¨²bditos al servicio del trono marroqu¨ª.

Al pasar el rey por la formaci¨®n alineada donde se encontraba el grupo de Melilla, ¨¦stos se replegaron hacia una banda en espera del regreso del monarca que prosegu¨ªa recibiendo la fidelidad de formaciones alineadas posteriormente.

Aplausos

Cuando termin¨® el rey Hassan, a quien acompa?aba a pie el ministro del Interior, Driss Basri, y ya regresaba hacia palacio, Dud¨² y sus acompa?antes -pr¨¢cticamente ocultos por la masa- le aplaudieron y le vitorearon al mismo tiempo que el resto de los presentes.Dud¨², Abdelkader y Uariachi se encontraban en Rabat desde el d¨ªa anterior y asistieron a mediod¨ªa a un almuerzo ofrecido por el Ministerio del Interior a todos los representantes llegados de provincias. La presencia del grupo de Melilla no ha causado sorpresa a los observadores diplom¨¢ticos espa?oles en Rabat puesto que en el mensaje real del pasado martes el rey dej¨® muy claro que los habitantes musulmanes de Ceuta y Melilla eran "fieles s¨²bditos" de la corona, lo que hac¨ªa suponer de antemano esta presencia. En La Bayaa del pasado a?o, en el que se conmemor¨® el 25 aniversario de la subida al trono de Hassan II, el invitado de honor fue el rey Juan Carlos, que ocup¨® la misma tribuna en esta ocasi¨®n reservada a Baker.

[El delegado del Gobierno en Melilla, Manuel C¨¦spedes, califico ayer de "suave, prudente y moderado" el discurso de Hassan II del martes].