V¨ªctor Mora publica episodios in¨¦ditos de 'El capit¨¢n Trueno' editados por Planeta
Aparece simult¨¢neamente una edici¨®n 'hist¨®rica' de las aventuras del h¨¦roe
J. J. N. A.Una colecci¨®n de episodios in¨¦ditos de las aventuras del m¨ªtico personaje del Capit¨¢n Trueno, creado por el escritor V¨ªctor Mora, acaba de aparecer en edici¨®n de Planeta-Agostini, dentro de la divisi¨®n F¨®rum de dicha editorial. Simult¨¢neamente, Ediciones B, empresa filial del Grupo Zeta, ha iniciado la reedici¨®n de los fondos hist¨®ricos de la colecci¨®n de El capit¨¢n Trueno editada por Bruguera. La aparici¨®n simult¨¢nea de ambas ediciones es conflictiva, pues mientras Mora afirma poseer la autor¨ªa y la propiedad intelectual del personaje, Ediciones B ampara su publicaci¨®n en la propiedad de la marca industrial del comic.
La edici¨®n de El capit¨¢n Trueno de Planeta-Agostini -de la que acaba de aparecer el primer n¨²mero- se titula Las nuevas aventuras del capit¨¢n Trueno. Cada entrega consta de 24 p¨¢ginas y se vende al precio de 140 pesetas. Los guiones son de V¨ªctor Mora y los dibujos de Luis Bermejo, quien sustituye a Ambr¨®s, primer dibujante de El capit¨¢n Trueno.Los cuadernos editados por Ediciones B recogen las primeras aventuras del personaje editadas por Bruguera desde 1956, cuyos fondos fueron adquiridos por el Grupo Zeta, empresa-madre de Ediciones B. Cada cuaderno consta de 32 p¨¢ginas y se vende a 175 pesetas. En esta reedici¨®n no se citan los nombres de V¨ªctor Mora ni de Ambr¨®s, el dibujante, y s¨®lo aparece la menci¨®n "propiedad y derechos reservados a favor de la editorial".
Acerca de esta situaci¨®n, V¨ªctor Mora dijo ayer a este diario que "no he autorizado la reedici¨®n de las primeras aventuras de El capit¨¢n Trueno, estoy en contra de ella y, desde luego, me parece escandaloso que que lo publiquen sin poner el nombre de los autores". "Cuando Bruguera quebr¨®", explica Mora, "yo ten¨ªa nueve contratos firmados por la editorial y rubricados por su abogado, seg¨²n los cuales, en el caso de que hubiera incumplimiento de contrato, yo soy muy libre de ir con mis personajes donde quiera. Estos contratos, pues, defienden mi propiedad comercial e intelectual".
"Lo que ten¨ªa Bruguera y ahora tiene Zeta", prosigui¨® Mora, "es la marca industrial de El capit¨¢n Trueno y creen que pueden editarlo as¨ª, pero es Inadmisible que no se citen los nombres de Ambr¨®s ni el m¨ªo; una cosa es que Ediciones B haya heredado los fondos de Bruguera y otra es que herede sus procedimientos".
Por otro lado, el autor de El capit¨¢n Trueno expres¨® sus esperanzas en una soluci¨®n pactada del conflicto. "Por un lado", dijo, "nosotros hemos interpuesto una demanda para que la marca industrial revierta a Ambr¨®s y a m¨ª, pero espero que haya una soluci¨®n pactada por la cual se citen nuestros nombres en la reedici¨®n y se nos paguen -a Ambr¨®s y a mi- los derechos debidos".
En el mismo sentido abund¨® el director general de Planeta-Agostini, Jos¨¦ Mas, quien explic¨® que "para nostros, V¨ªctor Mora es el autor, hemos hecho un contrato y publicamos sus creaciones. El autor ya actuar¨¢ en defensa de sus intereses y nosotros, como editorial, estamos a la expectativa desde la seguridad de tener un contrato perfectamente legal con V¨ªctor Mora". Este diario no pudo contactar ayer con Eduardo ?lvarez Puga, editor de Ediciones B, la empresa que reedita las primeras aventuras de El capit¨¢n Trueno.
Trueno aprende a besar
J. J. N. A.A los 31 a?os cumplidos, es evidente que el capit¨¢n Trueno ha experimentado su propia transici¨®n, al igual que la sociedad y el tiempo que le vieron nacer y popularizarse.
En las nuevas aventuras del m¨ªtico caballero medieval que comienza a editar Planeta-Agostini podremos hallar un Trueno menos un¨ªvoco, m¨¢s progresista s¨ª cabe, con mayores debilidades sentimentales y acompa?ado de una reina Sigrid m¨¢s sexy, un Goliath m¨¢s estilizado y un Crisp¨ªn m¨¢s contestatario que en las primeras entregas. Un buen ejemplo es que el capit¨¢n ha aprendido a besar y, en la primera entrega de sus nuevas aventuras, podemos verle enlazado a una bella odalisca, a la que acaba de rescatar del peligro.
"He tratado de hacer guiones m¨¢s adaptados a los tiempos y que, en lo posible, acent¨²en las caracter¨ªsticas del personaje que m¨¢s me gustaban", explica Mora, "pero al mismo tiempo intento que las aventuras transcurran en un marco hist¨®ricamente m¨¢s fiel. En la anterior etapa, debido en parte a la prisa con que produc¨ªamos las historietas y en parte a la censura, algunos detalles hist¨®ricos quedaban desdibujadas; ahora, tratar¨¦ de no defraudar a los lectores amantes de la precisi¨®n".
El punto m¨¢s pol¨¦mico del regreso de Trueno es el dibujo en el que Jos¨¦ Bermejo sustituye a Ambr¨®s.
Tanto Mora como los responsables de la edici¨®n, como Antonio Mart¨ªn, director de la divisi¨®n F¨®rum de Planeta Agostini, opinan que el dibujo es "m¨¢s adecuado a la ¨¦poca actual", aunque al mismo tiem po se?alan que "Ambr¨®s es uno de los mejores historietistas espa?oles de este siglo ejemplifica toda una escuela de adaptaci¨®n de historietas".
Otros truen¨®logos vinculados al mundo del c¨®mic creen que la nueva imagen del capit¨¢n Trueno es "demasiado barroca, demasiado prolija y sin el poder de sintesis v¨ªsual de las antiguas historietas".
Como se?ala un joven dibujante de c¨®mics barcelon¨¦s, "era perfectamente posible leer la misma aventura dos veces; una en los dibujos y la otra en el texto y al Final ten¨ªas la sensaci¨®n de haber le¨ªdo no una, sino dos historias".
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