El alcance de la segunda reconversi¨®n

La autorizaci¨®n de la Comisi¨®n Europea a las ayudas solicitadas por el Gobierno espa?ol constituyen la luz verde a lo que se ha dado en llamar segunda fase de la reconversi¨®n de la siderurgia o, en lenguaje oficial, "reajuste permanente" y "adaptaci¨®n competitiva" de este sector en crisis. Espa?a pasar¨¢ a participar plenamente de la pol¨ªtica de la Comunidad Europea del Carb¨®n y del Acero (CECA) en enero de 1989. Cuenta pues con menos de dos a?os para hacer competitiva a la siderurgia, ya que a partir de entonces las ayudas oficiales estar¨¢n prohibidas.

El Gobierno destinar¨¢, como m¨ªnimo, 223.000 millones de nuevas ayudas oficiales para el saneamiento de las empresas de siderurgia integral y de aceros especiales, con una reducci¨®n global de plantilla de 4.898 trabajadores. A ello hay que a?adir la reestructuraci¨®n de la veintena de empresas de acero com¨²n, cuya negociaci¨®n ser¨¢ posterior. Aunque nada ha sido fijado para este subsector y todo depende del acuerdo previo entre las empresas, se barajan ayudas al cierre de m¨¢s de 40.000 millones de pesetas y una reducci¨®n de plantilla que superar¨¢ los 3.000 puestos de trabajo. Por la magnitud de las ayudas p¨²blicas y la cuant¨ªa de los excedentes laborales, esta segunda fase de la reconversi¨®n sider¨²rgica representa m¨¢s de la mitad de lo hecho en 1984.

Lo que el Ministerio de Industria se plantea de inmediato es el saneamiento financiero y la reducci¨®n de empleo en las dos sider¨²rgicas integrales (Ensidesa y Altos Hornos de Vizcaya), las cinco empresas de aceros especiales que forman el grupo Acenor 31 la del INI, Forjas y Aceros de Reinosa (Foarsa). Casi la mitad de las ayudas proyectadas (110.000 millones de pesetas) ir¨¢n destinadas a Altos Hornos de Vizcaya, empresa que no puede hacer frente a los cr¨¦ditos contraidos y en la que no est¨¢n previstos cierres de instalaciones.

Espa?a est¨¢ obligada por el Tratado de Adhesi¨®n a reducir su capacidad sider¨²rgica instalada a 18 millones de toneladas. Este recorte est¨¢ cuantificado por la Comisi¨®n Europea en 3,2 millones, aunque Industria siempre ha defendido que la capacidad te¨®rica actual de algo m¨¢s de 21 millones est¨¢ hinchada. La producci¨®n espa?ola de acero fue en 19,86 de 12,8 millones de toneladas, de las que el consumo interno absorbi¨® algo m¨¢s de la mitad. El Gobierno, ampar¨¢ndose en las razones de un mercado deprimido, pareci¨® aceptar la recomendaci¨®n de la CE de una reducci¨®n superior a los tres millones, si bien siempre calific¨¢ndola de simb¨®lica.

Nuevos reajustes

El cu¨¢nto de ese cierre a?adido de las instalaciones productivas actuales est¨¢ a¨²n por precisar, porque la cifra global de m¨¢s de tres millones de toneladas est¨¢ sometida a la reestructuraci¨®n del subsector de acero com¨²n, que padece tambi¨¦n una sobredimensi¨®n de producciones y plantillas. Sorprende que la Comisi¨®n Europea haya ofrecido a Espa?a la posibilidad de utilizar 60.000 millones m¨¢s de los solicitados (283.322 en lugar de 223.322 millones de pesetas).

El ministro de Industria, Luis Carlos Cropissier, avanz¨® ante el Congreso que Ensidesa y las empresas de aceros especiales reducir¨ªan su capacidad en 870.000 toneladas. El resto parec¨ªa corresponder al acero com¨²n. Ahora la CE habla ya de 3.950.000 toneladas, a las que habr¨ªa que a?adir otras 200.000 si se conceden esos 60.000 millones de subvenciones adicionales.

La permisividad en ayudas est¨¢ vinculada a un mayor cierre de instalaciones, por la presi¨®n de las restantes sider¨²rgicas europeas, enfrentadas a un nuevo recorte de capacidad de 11 millones de toneladas. Si la CE tiene raz¨®n, la reducci¨®n prevista por el Gobierno crecer¨¢ en un mill¨®n de toneladas, lo cual va a obligar a nuevos reajustes del reajuste.