El BCA estudia presentar, una oferta para sanear la Caja Rural de Cantabria
El Banco de Cr¨¦dito Agr¨ªcola (BCA) y el grupo asociado de cajas rurales estudian en estos d¨ªas la posibilidad de conceder ayudas a la Caja Rural de Cantabria para reflotarla e impedir su exclusi¨®n del Fondo de Garant¨ªa de Dep¨®sitos (FGD), siempre y cuando se pueda cambiar la gesti¨®n de la entidad, se alcance un acuerdo por el que los trabajadores abandonen las posiciones actuales de huelga y el propio fondo acepte prorrogar el saneamiento un a?o m¨¢s. El mantenimiento de la Caja Rural de Palencia aparece como m¨¢s dif¨ªcil, dado su nivel de p¨¦rdidas acumuladas y el volumen de ayudas suplementarias que exigir¨ªa.
La decisi¨®n de la comisi¨®n gestora del FGD en cooperativas de cr¨¦dito de aplazar durante 15 d¨ªas una toma de decisi¨®n sobre el futuro de las cajas rurales de Cantabria y Palencia, aunque rechaz¨® los planes de viabilidad presentados, ha dejado abierta una puerta para un posible reflotamiento. El Banco de Cr¨¦dito Agr¨ªcola, que tiene que renegociar en estas semanas el convenio con las cajas rurales asociadas, trata de demostrar que la asociaci¨®n sirve para algo, y por ello est¨¢ intentando forzar un acuerdo que permita la supervivencia de una entidad y la venta ordenada de otra.
Por lo que se refiere a la Caja Rural de Cantabria, con unas p¨¦rdidas acumuladas a finales del pasado ejercicio de 1.500 millones de pesetas, la soluci¨®n pasar¨ªa por una aportaci¨®n por parte del grupo BCA-cajas rurales de unos 200 millones de pesetas en forma de nuevo capital, que no recibir¨ªa retribuci¨®n alguna hasta que no estuviera en rentabilidad, pero exige a cambio que se clarifiquen algunos aspectos ,previos que el grupo no puede solucionar por s¨ª mismo.
Entre estos aspectos se encuentran el que se considera necesario cambio de la gesti¨®n actual, que debe aceptarse por el consejo rector de la caja; el compromiso de los trabajadores de abandonar su posici¨®n de huelga, y que el Banco de Espa?a y el FGD acepten prolongar por un a?o m¨¢s la vigencia del plan de saneamiento dise?ado, para un periodo de cinco a?os, hace ahora poco menos de tres.
Las cajas rurales asociadas ver¨ªan con buenos ojos que se tomara una decisi¨®n de este tipo de forma que se frenara el proceso de desaparici¨®n de algunas entidades en determinadas zonas geogr¨¢ficas, y en el propio BCA se entiende que ¨¦sta es una ocasi¨®n compradora se hiciera cargo de las p¨¦rdidas proporcionales 11 n¨²mero de oficinas que adquiriera no es aceptada por los potenciales compradores, que adem¨¢s querr¨ªan quedarse todos ellos con las oficinas situadas en las poblaciones m¨¢s importantes.
Otra alternativa que se maneja es vender las oficinas libres de cargas y que el FGD asuma los cr¨¦ditos fallidos, pero a esto se opone el propio fondo, que recuerda la decisi¨®n de la Comisi¨®n Delegada del Gobierno para Asuntos Econ¨®micos de que el saneamiento de las cajas rurales no debe suponer nuevas ayudas p¨²blicas.
La tercera hip¨®tesis que se ha manejado, aunque se ha descartado, es vender las oficinas y proceder despu¨¦s a la suspensi¨®n de pagos, porque ello significar¨ªa un fraude de ley que exigir¨ªa la anulaci¨®n de los acuerdos de venta tomados con anterioridad.
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