'Cuenta atr¨¢s' en el proceso de Klaus Barbie
El juicio contra el jefe de la Gestapo en Ly¨®n comienza el 11 de mayo
La ciudad de Ly¨®n se prepara para su segundo gran acontecimiento internacional de los ¨²ltimos seis meses, despu¨¦s de la visita del Papa el pasado mes de octubre. Se trata del proceso contra quien fue el jefe de la Gestapo de esta ciudad durante los a?os de ocupaci¨®n alemana, Klaus Barbie, que se celebrar¨¢ a partir del 11 de mayo y durar¨¢ como m¨ªnimo un mes y medio. Casi un centenar de testigos han sido ya citados para comparecer en este juicio, en el que el acusado deber¨¢ responder ante un tribunal de lo criminal formado por tres magistrados profesionales y nueve jurados populares de la acusaci¨®n de cr¨ªmenes contra la humanidad.
Grupos, de extrema derecha han difundido en los ¨²ltimos d¨ªas en Ly¨®n y han mandado a los abogados de la acusaci¨®n particular unos panfletos en los que se niega la existencia de los campos nazis de exterminio. Dos historiadores franceses, uno de ellos lion¨¦s, han defendido esta tesis que pretende atribuir el holocausto a la fantas¨ªa jud¨ªa. Pero, por el momento, no existe ninguna psicosis de peligro en la ciudad del R¨®dano y el Saona, sino todo lo contrario. Las habitaciones de hotel est¨¢n pr¨¢cticamente todas reservadas a partir del 11 de mayo. El municipio ha destinado un presupuesto especial para organizar el ocio de los numerosos visitantes que reportar¨¢ el juicio de Barbie y numerosas asociaciones antifascistas preparan actos y exposiciones destinados a denunciar los cr¨ªmenes contra el nazismo.La Sala de la Audiencia de Ly¨®n ha sido especialmente acondicionada para acoger a unos 400 periodistas de los 700 que han solicitado acreditaciones, a m¨¢s de 30 abogados representantes de los familiares de v¨ªctimas y de supervivientes, que comparecen como parte civil en la causa, y al numeroso p¨²blico que desea asistir al proceso. Por primera vez, se realizar¨¢ una grabaci¨®n en v¨ªdeo del proceso, destinada a los archivos judiciales, que no podr¨¢ ser consultada por los historiadores hasta dentro de 10 a?os y por el gran p¨²blico hasta dentro de 50.
Entre los testigos se cuentan el premio Nobel de la Paz, el escritor de lengua francesa residente en Estados Unidos, superviviente ¨¦l mismo de los campos de concentraci¨®n, Elie Wiesel, y el periodista franc¨¦s Andr¨¦ Frossard, columnista habitual del conservador Le F?garo, que estuvo detenido en tiempos de Barbie en la c¨¢rcel de Montluc, de triste memoria durante la guerra mundial por las ejecuciones y torturas ejercidas sobre los detenidos. Entre los letrados, lo m¨¢s granado de la abogac¨ªa francesa, como el cazador de nazis Serge Klarsfeld, el ex ministro de Asuntos Exteriores socialista Roland Dumas, por la acusaci¨®n, y, por la defensa, Jacques Verg¨¨s, tambi¨¦n defensor del liban¨¦s George Ibrahim Abdala en el proceso en que fue condenado a perpetuidad por tres asesinatos.
Barbie deber¨¢ responder de numerosas acusaciones de asesinato, torturas, malos tratos y secuestro seguido de muerte por siete casos concretos. Entre ellos se cuentan los casos de los ni?os de Izieu, colonia de hijos de deportados cuyos ocupantes de 3 a 15 a?os fueron detenidos y gaseados en Auschwitz; la redada de la calle de Santa Catalina, en la que 84 franceses jud¨ªos fueron detenidos y deportados, y el llamado ¨²ltimo convoy, un tren con 650 personas, procedentes de las prisiones utilizadas por la Gestapo lionesa, que parti¨® el 11 de agosto de 1944 hacia la muerte, cuatro d¨ªas antes del desembarco aliado en la costa sur francesa. "Este proceso es una verg¨¹enza para Francia, demuestra que esto no es un Estado de derecho", asegura Jacques Verg¨¨s, el defensor de Barbie. Seg¨²n su opini¨®n la no prescripci¨®n de los cr¨ªmenes contra la humanidad, votada en el Parlamento en 1984, rompe con toda la tradici¨®n jur¨ªdica francesa y es del todo ilegal. Pero, adem¨¢s, el defensor asegura que se han transgredido todas las garant¨ªas jur¨ªdicas en lo que ¨¦l califica de "secuestro" de su cliente en Bolivia en 1982 y posterior traslado a Ly¨®n y en el linchamiento moral que se est¨¢ realizando con ¨¦l desde entonces. El defensor asegura que Barbie no tiene nada que ver con la persecuci¨®n antijud¨ªa y que su actuaci¨®n como jefe de la Gestapo, fue juzgada ya en su d¨ªa en 1951 y 1954, y que en cualquier caso ya ha prescrito, seg¨²n el derecho franc¨¦s. "Pero Barbie se va a convertir de acusado en acusador", dice Verg¨¨s, "y vamos a procesar en Ly¨®n a la Francia de la colaboraci¨®n, a la Francia de los traidores a la resistencia, a la Francia de la guerra de Argelia".
"Ni Barbie ni Verg¨¨s cuentan con cartas escondidas", asegura Serge Klarsfeld. "La defensa de Verg¨¨s se fundamenta en la difamaci¨®n de los resistentes y de los jud¨ªos", afirma. Y a?ade: "De otra parte, no me extra?a su trayectoria, pues defiende a quienes matan jud¨ªos ahora y a quienes los mataron hace m¨¢s de 40 a?os". Para este abogado, "ha sido Francia la que ha querido que el tema de la resistencia entrara tambi¨¦n en el proceso contra Barbie, y que no se tratara ¨²nicamente de la persecuci¨®n contra los jud¨ªos".
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