Helic¨®pteros en el cigarral.

La escultura realizada por Eduardo Chillida para conmemorar el centenario del nacimiento de Gregorio Mara?¨®n, hijo ilustre de Toledo, qued¨® ayer instalada en la parte m¨¢s alta del cigarral Los Dolores, en el que el doctor madrile?o pas¨® sus mejores a?os, informa Se trata de un asiento de hormig¨®n armado de un metro cuadrado de volumen seis toneladas de peso, y , que evoca la figura de Mara?¨®n mirando hacia Toledo. Fue transportado en suspensi¨®n a primera hora de la ma?ana, desde Arganda del Rey (Madrid), por un helic¨®ptero Chinook del Ej¨¦rcito de Tierra. Paralelamente, desde un Superpuma de la Casa Real, el rey Juan Carlos sigui¨® con su c¨¢mara fotogr¨¢fica las evoluciones del primer helic¨®ptero hasta que la escultura fue depositada en el altozano de la finca de los Mara?¨®n. El Chinook tuvo que realizar un par de intentos antes de dejar en el suelo la mole de hormig¨®n, y en el primero de ellos, el soporte de la pieza escult¨®rica derrib¨® uno de los cuatro muros de contenci¨®n levantados para albergar la obra. La operaci¨®n fue seguida con dificultades por los informadores gr¨¢ficos debido a las turbulencias provocadas en el ambiente por las h¨¦lices de los aparatos. El ruido de ¨¦stos hizo que los vecinos- salieran -algunos en pijama- para ver lo que ocurr¨ªa. El cigarral Los Dolores, antiguo convento del siglo XVII, fue adquirido por Gregorio Mara?¨®n en 1921, tras uno de los viajes que realiz¨® junto a Benito P¨¦rez Gald¨®s por los alrededores de la ciudad. En la fotografia de la derecha, Chillida inspecciona el lugar donde qued¨® instalada la escultura. A la izquierda, el helic¨®ptero que transportaba la escultura, seguido de cerca por otro desde el que hac¨ªa fotograf¨ªas el Rey, que participaba en la realizaci¨®n del libro. Un d¨ªa en la vida de Espa?a.