Mosc¨² quiere aplicar en la Unesco el nuevo esp¨ªritu de Gorbachov

El embajador de la Uni¨®n Sovi¨¦tica en la Unesco, Yuri M. Khiltchevski, sorprendi¨® el pasado viernes al comit¨¦ ejecutivo de la agencia de las Naciones Unidas para la Educaci¨®n y la Cultura. En su intervenci¨®n en el debate sobre el presupuesto para los dos pr¨®ximos a?os, Khiltchevski critic¨® la burocratizaci¨®n de la Unesco, la ineficacia de muchos programas y los costes excesivos de personal, "en el esp¨ªritu de reestructuraci¨®n, de democratizaci¨®n y de transparencia aplicadas en la Uni¨®n Sovi¨¦tica". El embajador sovi¨¦tico quiere, pues, que la famosa perestroika salga de las fronteras de los pa¨ªses socialistas y se extienda a los organismos internacionales.El embajador sovi¨¦tico critic¨® la excesiva dispersi¨®n de los programas de la Unesco, el crecimiento de los altos cargos ("un ej¨¦rcito original, con muchos generales y pocos soldados", dijo), los excesivos gastos de viajes y dietas, el car¨¢cter de muchas actividades, cuyo inter¨¦s no trasciende fuera de los muros de la propia sede de la organizaci¨®n, o el acento excesivo que recibe la cuesti¨®n femenina. "La Unesco no ha sido creada y funciona para servir al personal", dijo, sino que "es el personal el que ha sido contratado para asegurar el funcionamiento de la Unesco".

Con esta toma de posici¨®n, la Uni¨®n Sovi¨¦tica se alinea pr¨¢cticamente con los pa¨ªses industrializados, frente a las naciones en desarrollo, en la exigencia de una mayor austeridad econ¨®mica y una mejor gesti¨®n, con el objetivo, para el momento de la elecci¨®n del nuevo director general, en septiembre, de la recuperaci¨®n de la universalidad , es decir, el regreso de EE UU y Gran Breta?a. "Contamos con la comprensi¨®n del director general [Amadou M'Bowl sobre la dif¨ªcil situaci¨®n en que se encuentran los pa¨ªses, principalmente los grandes contribuyentes al presupuesto de la Unesco", agreg¨®.