El destino definitivo de la colecci¨®n Von Thyssen se decidir¨¢ dentro de dos meses

El bar¨®n Heinrich von Thyssen Bornemisza particip¨® ayer en Madrid en un coloquio convocado por el Club Siglo XXI, en el que manifest¨® que todav¨ªa no ha tomado una decisi¨®n sobre el futuro destino de su colecci¨®n de arte, una de las m¨¢s importantes del mundo, aunque la posibilidad de que venga a Espa?a sigue siendo una de las que m¨¢s pesan. "La decisi¨®n final la tomar¨¦ dentro de dos o tres meses", dijo.

Aunque el tema previsto para el coloquio era El arte como uni¨®n entre los pueblos, la mayor parte de las preguntas dirigidas al bar¨®n Thyssen se refirieron a la posibilidad de que su colecci¨®n de pintura viniese para permanecer en Espa?a. "No pido ninguna contrapartida a Espa?a para que mi colecci¨®n venga aqu¨ª", manifest¨® el bar¨®n Thyssen, a quien su esposa, la, espa?ola Carmen Cervera serv¨ªa de traductora. "Se trata de una decisi¨®n sobre cu¨¢l ser¨¢ el mejor futuro de la colecci¨®n y una decisi¨®n que tomar¨¦ con la ayuda de mi mujer".Las otras posibilidades sobre el destino de la colecci¨®n son Suiza -lugar de residencia de Thyssen y donde se encuentra actualmente la colecci¨®n- y Estados Unidos. "No quiero que se tome este asunto como un campeonato de f¨²tbol entre Suiza y Espa?a. Hay otras instituciones que han tratado de persuadirme tambi¨¦n y finalmente no es seguro que la colecci¨®n se quede en Europa".

"Los criterios por los que me guiare no son econ¨®micos o financieros, porque, por fortuna, puedo ser independiente en ese sentido. La prensa suiza public¨® en su momento que yo utilizaba la carta espa?ola para negociar con el alcalde de Lugano, pero pienso que ya se han dado cuenta de que no es as¨ª. Dentro de dos o tres meses podr¨¦ tomar definitivamente una decisi¨®n al respecto".

El amor

Las preguntas iban y ven¨ªan y luego volv¨ªan a recaer en lo mismo: si Carmen Cervera hab¨ªa sido quien propuso y sostuvo ante su marido la idea de que la colecci¨®n venga a Espa?a o si tendr¨ªa que ver con la decisi¨®n final. Ella respondi¨®: "Estas cosas se deciden por amor a un pa¨ªs o por amor al arte, no por el amor a una persona".Luego a?adi¨® que el argumento que ella le hab¨ªa expuesto para convencerlo de aceptar la propuesta espa?ola era que la colecci¨®n Thyssen, unida a la del Museo del Prado, formar¨ªan quiz¨¢ el conjunto art¨ªstico m¨¢s importante del mundo.

El bar¨®n Thyssen afirm¨® que su relaci¨®n con Espa?a es muy antigua. "Yo visit¨¦ Espa?a por primera vez en 1950 y tengo una casa en Marbella desde 1960. El Prado ha sido siempre mi museo preferido, aunque hay ciertas cosas que yo mejorar¨ªa. Si mi colecci¨®n estuviera cerca, del Prado, que recibe cuatro millones de visitantes al a?o, estoy seguro de que ella tambi¨¦n ser¨ªa visitada por esta gente".

Entre las cr¨ªticas al Prado figuran el estado de limpieza del museo y su sistema de seguridad. "Cuando visitaba el Prado me sorprend¨ªa ver que el Guernica tuviera veinte guardias y el museo no tuviera ninguno. Ahora ha mejorado la situaci¨®n y considero el ofrecimiento del palacio de Villahermosa muy atractivo. No obstante, para que yo acepte, tendr¨ªa que estipularse claramente cu¨¢l ser¨ªa el presupuesto destinado a la seguridad de la colecci¨®n, porque pienso que el que tiene ahora es insuficiente".