El Museo de Etnolog¨ªa expone la funci¨®n de las drogas en diversas culturas
La exposici¨®n Culturas y drogas, que presenta desde ayer el Museo Nacional de Etnolog¨ªa de Madrid, recientemente reformado, pretende ofrecer un aspecto poco conocido del mundo de las drogas. El uso de sustancias sedantes, estimulantes o alucin¨®genas en la mayor parte de las culturas americanas y asi¨¢ticas ha tenido una funci¨®n muy distinta de la que ahora ¨¦stas tienen en la sociedad occidental.
La exposici¨®n que se presenta en el Museo de Etnolog¨ªa est¨¢ dividida en dos grandes partes, una dedicada a los diferentes, tipos de drogas en Asia, ?frica y Am¨¦rica y otra dedicada principalmente al tabaco en el mundo. Dolores Garc¨ªa, una de los coordinadores de la muestra, explica que la principal intenci¨®n de la exposici¨®n es informar acerca de los diversos significados que tiene o han tenido el consumo de drogas en distintas culturas del mundo. "Lo que queremos es aclarar al gran p¨²blico la diferencia entre el modelo tradicional y el modelo consumista en la utilizaci¨®n de las drogas".En la exposici¨®n se incluyen sobre todo documentos y utensilios ligados al consumo de sustancias estimulantes o alucin¨®genas, as¨ª como objetos rituales relacionados tambi¨¦n con los diversos tipos de sustancia y su utilizaci¨®n. Como complemento se exhibe un v¨ªdeo documental sobre este tema. No se incluyen muestras de las drogas estudiadas.
Tratamos de aclarar que, por ejemplo, en algunas de estas sociedades el concepto de droga y drogadicto no existe. Sustancias como el yopo, el peyote, el c¨¢?amo o el khat son consumidas y tienen una funci¨®n de relaci¨®n social, ritual de intercambio amistoso", afirma Dolores Garc¨ªa.
Distinciones
Domingo Comas, asesor cient¨ªfico de esta exposici¨®n, piensa que la distinci¨®n entre el modelo tradicional y el consumista es esencial para la comprensi¨®n del fen¨®meno. "En el modelo tradicional, una droga es producida por el propio usuario, o intercambiada ritualmente con un grupo af¨ªn, y se consume en el contexto de una serie de limitaciones normativas que impiden su generalizaci¨®n. En el modelo consumista, las drogas se adquieren a trav¨¦s de transacciones econ¨®mico-monetarias, en el contexto de una distribuci¨®n de mercado generalizado y unas pr¨¢cticas tecnol¨®gicas que lo hacen posible. El individuo tiene acceso a las drogas con independencia de qui¨¦n y d¨®nde se han producido".Seg¨²n se desprende de esta exposici¨®n y se aclara extensamente despu¨¦s en el texto del cat¨¢logo que se ha publicado con este motivo, el tabaco es el gran protagonista de la historia de las drogas.
"El tabaco, en su modelo tradicional, era una droga alucin¨®gena circunscrita al ¨¢rea caribe?a y aleda?os en la ¨¦poca precolombina. Se usaba fum¨¢ndola y, lo mismo que otras drogas, se tomaba con funciones m¨¢gico-religiosas. Cuando los espa?oles llegaron a la zona recogieron la planta y, como otras, la aclimataron en Europa". "Poco despu¨¦s comenzaron a utilizarla, pero bajo otra presentaci¨®n y otros fines, en forma de un fino polvo que se aspiraba por la nariz y produc¨ªa efectos excitantes".
Lo sobrenatural
En Am¨¦rica las plantas alucin¨®genas, regalos de los dioses, son todav¨ªa consideradas y utilizadas como intermediarias para entrar en contacto con lo sobrenatural y, en algunos casos, se aprovechan tambi¨¦n sus propiedades curativas. Las m¨¢s conocidas son el tabaco, la coca, el peyote, el yote amaz¨®nico y los hongos alucin¨®genos.En ?frica la importancia de las drogas var¨ªa seg¨²n las zonas geogr¨¢ficas, y su utilizaci¨®n tiene un car¨¢cter predominantemente social, aunque tambi¨¦n cumple funciones rituales y medicinales. En ?frica el tabaco y el c¨¢?amo son las mas difundidas, aunque tambi¨¦n se utilizan otras drogas tradicionales, como el khat y las kota. En Oriente el consumo del betel, el kava, el opio y el tabaco se encuentran arraigados en la sociedad tradicional y en la cultura en que se integran. "Su utilizaci¨®n se halla rodeada de una estricta reglamentaci¨®n que permite abstraer sus distintas funciones simb¨®licas y rituales", seg¨²n Dolores Garc¨ªa.
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