Duncan Dhu, sue?os ac¨²sticos
El tr¨ªo donostiarra Duncan Dhu recibi¨® el disco de oro por la venta de 50.000 copias de su ¨¢lbum Canciones, en un breve acto que present¨® Gran Wyoming. Estos j¨®venes han refinado algo m¨¢s su estilo ac¨²stico, siempre mediante la elaboraci¨®n e interpretaci¨®n muy elementales de canciones igualmente sencillas de melod¨ªa y estructura. Por eso el t¨ªtulo de su disco premiado es tan certero.El bater¨ªa de esta formaci¨®n hubo de conformarse con tocar la pandereta, por lesi¨®n en un dedo. Adem¨¢s, los tres se acompa?an ahora de un guitarra y un saxo-flautista. Los textos, de lirismo juvenil, claro y on¨ªrico, se sucedieron a ritmo ligero. En su atracci¨®n por lo lejano cantan a la leyenda escocesa (Por tierras escocesas, Sue?o escoc¨¦s), y en esa ternura, llena de glucosa, se funden con las voces del p¨²blico, las m¨¢s femeninas, muy identificadas con Yo no puedo evitar pensar en ti. Disfrutaron de ayuda coral semejante en las dos interpretaciones de Cien gaviotas -repitieron el tema al final-, anunciada con voz serena y sin pretensi¨®n alguna por el cantante Mikel Erentxun: "Esta canci¨®n est¨¢ hecha para poderla cantar con todos vosotros".
Duncan Dhu
Concierto de Duncan Dhu (72 minutos): Mikei Erentxun, voz y guitarra ac¨²stica; Diego Vasallo, bajo y coros, y Juan Ram¨®n Viles, pandereta.Acompa?ados de Javier Aguirre, bater¨ªa; Pablo Moreno, guitarra ac¨²stica, y John Azpillaga, saxo y flauta. Sala J¨¢cara. Madrid, 29 de mayo.
Duncan Dhu, directos, sueltos, n¨ªtidos en disco, topan en directo con la dificultad de amplificar su sonido ac¨²stico, con el riesgo de perder la claridad y la frescura de sus temas, debido no s¨®lo al tratamiento delicado desde la mesa de sonorizaci¨®n sino tambi¨¦n a las condiciones ac¨²sticas del lugar donde tocan. Quiz¨¢ gran parte de los asistentes no lo advirti¨® o no les import¨® y mostraron su benepl¨¢cito con palmas o bailes pausados.
Estos comunicadores musicales son espl¨¦ndidos hacedores de canciones populares, y Casablanca, el primero, y La vieja escuela son ejemplos muy acertados. A?aden a su repertorio otras melod¨ªas viejas, O sole m¨ªo o B¨¦same mucho, ¨¦sta en versi¨®n acelerada y precedida de una introducci¨®n seudojazzera del saxo, tan despistado como esa flauta que dulcifica a¨²n m¨¢s ciertas piezas.
En Dime tu nombre acaban de confirmar su ingenua sencillez al conservar el esp¨ªritu festivo, intrascendente, poppi, de aquellas canciones de finales de los sesenta.
Duncan Dhu son tres seres inquietos que ofrecen m¨²sica enso?ada.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.