El ejemplo de las entidades espa?olas

A lo largo del ejercicio de 1986 bancos y cajas de ahorros espa?olas llevaron a cabo operaciones similares a las que acaban de anunciar algunos bancos de Estados Unidos de proceder a sanear sus carteras o provisionar sus obligaciones contra¨ªdas para resolver los problemas de solvencia a que se pod¨ªan ver abocados.El Banco Espa?ol de Cr¨¦dito (Banesto), destin¨® todos los recursos generados en 1986 para sanear uno de sus bancos filiales, as¨ª como otras operaciones directamente achacables a su cartera, y algunas cajas de ahorro, que han declarado p¨¦rdidas para poder cubrir la mayor parte de sus fondos de pensiones para los trabajadores en activo, son algunos de estos ejemplos.

El mecanismo en definitiva es muy similar al realizado ahora por algunos bancos norteamericanos. Banesto anunci¨® en el pasado mes de octubre que todos los recursos generados servir¨ªan para cerrar los agujeros producidos por el Banco Garriga Nogu¨¦s, por sus propios fallidos m¨¢s importantes y para empezar a constituir el fondo de pensiones para sus trabajadores activos.

Banesto, adem¨¢s, sufri¨® en 1986 un cierto proceso de descapitalizaci¨®n porque se decidi¨® utilizar una parte de sus reservas para retribuir a los accionistas un dividendo igual al de los dos ejercicios anteriores. Junto a ello no se produjo el normal incremento de reservas de cada a?o, consecuencia de embalsar una parte de los beneficios obtenidos como nuevos recursos propios dentro de la entidad.

Disminuir reservas

Algunas cajas de ahorro, destacando entre ellas la Caixa, decidieron al tiempo destinar todos los recursos obtenidos a cubrir el fondo necesario para hacer frente a las necesidades de complemento de pensiones de sus trabajadores activos y algunas, entre ellas la mayor entidad de este tipo, redujo sus reservas para completar este fondo y mantener la obra social durante el ejercicio actual.Todas estas entidades, adem¨¢s de lograr una mejor situaci¨®n patrimonial al solucionar problemas pendientes, a los que antes o despu¨¦s tendr¨ªan que hacer frente, consiguieron importantes ahorros fiscales, que se ir¨¢n traduciendo en los pr¨®ximos ejercicios cuando puedan ir deduciendo de sus liquidaciones a Hacienda las p¨¦rdidas contabilizadas en el pasado a?o.

Algo similar a lo que vienen haciendo desde hace algunos a?os el conjunto de los bancos espa?oles, aunque en distinta proporci¨®n cada seg¨²n sus posibilidades, con las provisiones para riesgo-pa¨ªs o para los fondos de pensiones de sus trabajadores ya jubilados.