Todos los argumentos para vencer a la URSS

VICENTE SALANER Espa?a tiene absolutamente todos los argumentos necesarios para optar a la victoria esta tarde. El equipo espa?ol ha resultado m¨¢s compacto y eficaz de lo que los sesudos columnistas preve¨ªan y el sovi¨¦tico est¨¢ indudablemente debilitado por las ausencias de Arvidas Sabonis y Aleksander Belosteni, sus ¨²nicos p¨ªvots intimidadores desde que VIadimir Tkachenko -antes, por su lesi¨®n en un pie; ahora, por una rumoreada ¨²lcera de est¨®mago- perdiese la salud y la movilidad.

El ap¨¢tico segundo tiempo hispano en el Espa?a-URSS del domingo pasado dej¨® una imagen de superioridad reboteadora sovi¨¦tica que no tiene por qu¨¦ reproducirse en condiciones normales, en un partido jugado a fuerte ritmo y con una s¨®lida defensa individual por el equipo espa?ol.

El m¨¢s eficaz reboteador sovi¨¦tico viene siendo el feo suplente Viktor Panjrasjin, en ning¨²n modo superior a Fernando Romay, y Andr¨¦s Jim¨¦nez tiene que salir mentalizado con que Aleksander Volkov no es ni m¨¢s alto ni mejor que ¨¦l. Pero hay m¨¢s: en sus minutos contra Alemania -¨¦sos s¨ª que eran altos...- Ferran Mart¨ªnez dio una impresi¨®n de autoridad m¨¢s n¨ªtida que en partidos anteriores, y como Fernando Arcega -sin muchos rebotes, pero con buen oportunismo- tambi¨¦n ha subido de nivel, a lo mejor no est¨¢ tan hu¨¦rfana de suplentes altos la selecci¨®n.

En ataque, Espa?a es al me nos tan eficaz como la URSS, equipo en el cual la revelaci¨®n Sharunas Marchulenis no hace sino sustituir al descartado Rimas Kurtinaitis, su futuro compa?ero de club en Kaunas, pero sin que suba el rendimiento global del conjunto, sino -porque Sabonis no est¨¢- que ese rendimiento sigue mermado.

As¨ª las cosas, la clave de la superioridad que Espa?a debe exhibir queda bien aparente: la defensa. En particular, la defensa contra el juego r¨¢pido que los sovi¨¦ticos desarrollan, a la espa?ola, desde hace varios a?os. D¨ªaz-Miguel tiene raz¨®n al se?alar la eficacia del marcaje del base espa?ol al alero m¨¢s peligroso -y, por ello, el m¨¢s adelantado- del equipo rival en situaciones de contraataque.

Hoy puede ser el alto y flaco Valeri Tijonenko: habr¨¢ que esforzarse mucho. Y el hombre m¨¢s indicado para lograrlo deber¨ªa ser Jos¨¦ Antonio Montero, el arma secreta y, junto a Romay, la raz¨®n principal del alza espa?ola, aunque tampoco hay que olvidar que Juan Antonio San Epifanio, en gran forma, es otro con relaci¨®n al jugador agotado del pasado Mundial: otro factor positivo, en suma, para una haza?a espa?ola.