Ilustrados
Pre/minu¨¦ de Montesquieu, entre el liberalismo y la nobleza, paradoja de Diderot, hostilidad sombr¨ªa de Rousseau, que vuelve como un criado, por la puerta de atr¨¢s, a decir las verdades del criado. Caudillismo c¨ªvico de Costa, en Espa?a, con su empuje mental de jotica aragonesa, burguesismo intelectual de Aza?a, elegancia socr¨¢tica de Ortega, liberalismo corrupto de Madariaga, que finalmente encuentra su modelo hist¨®rico, tan so?ado desde Ginebra, en De Gaulle. Araquist¨¢in, el lusitano Pessoa, tocado de sansebastianismo y saudadismo de su predecesor. Pascoa¨¦s, Marinetti, haciendo a h¨¦lice el futurismo fascista, cuando cre¨ªa o quer¨ªa hacer otro, Tierno Galv¨¢n, precursor intelectual y pol¨ªtico de la democracia espa?ola. Ra¨²l Morodo publica un apasionante y desapasionado libro sobre Tierno Galv¨¢n y otros precursores pol¨ªticos. Marxismo y utopismo, la lucha por la democracia. El bello y eficaz libro deMorodo viene a recordarnos que Tierno fue, ante todo, un ilustrado. Los ilustrados nacen en Europa con la Revoluci¨®n Francesa, y su m¨¢s evidente y p¨¢lido reflejo en Espa?a es Jovellanos. Tierno es el ¨²ltimo ilustrado, dir¨ªa yo. El ilustrado puede ser liberal (incluso conservador), puede ser revolucionario, reformista, arbitrista, progresista, dem¨®crata, populista incluso, pero el carisma de ilustrado es un pentecost¨¦s que nace de la Enciclopedia y arde con su lengua de fuego sobre quien quiere. En la pol¨ªtica espa?ola actual uno no ve ilustrados, salvo Alfonso Guerra, quiz¨¢. Por la derecha, Fraga es un contrailustrado que le ha dado la vuelta a todo lo que sabe.Los dem¨¢s van a su aire. Saben de n¨²meros, pero los n¨²meros no cantan, sino que cuentan, mienten. Hay que llevar a Montesquieu en el portafolios para ser algo m¨¢s que unyuppy. La Ilustraci¨®n, como el barroco, aparte un momento hist¨®rico, es una manera de ser y estar, una instalaci¨®n en la vida. Se puede ser marxista ¨¢grafo y socialdem¨®crata ilustrado. Y a la inversa. La Ilustraci¨®n es una manera de ver el mundo desde su totalidad cultural -Enciclopedia, y el enciclopedismo soluble que vendr¨ªa despu¨¦s-, y no desde el presente romo y apresurado. La Ilustraci¨®n es el quinqu¨¦ que ha puesto luz de gas en las tinieblas exteriores (a las que tanto tem¨ªa el hombre), para siempre. El libro de Morodo es un enriquecido homenaje a Tierno, el ¨²ltimo ilustrado espa?ol despu¨¦s de Aza?a y Ortega.
Ahora vuelven los anticuarios, en bienal y por libre. Los anticuarios son los traperos de la Ilustraci¨®n. Guardan lo que la Historia tira. Don Alfonso XIII patinaba, pero no era un ilustrado (en plena neoilustraci¨®n espa?ola) y quiz¨¢ eso le perdi¨®. La Iglesia, que nunca quiso ser ilustrada, sino vivir como reh¨¦n del tomismo (y el tomismo no es sino el ¨²ltimo reh¨¦n del aristotelism¨®), desaconseja las medidas profil¨¢cticas contra el SIDA y recomienda la sexualidad matrimonial, que naturalmente no es sexualidad. Redondo cree que el baj¨®n del PSOE es un castigo a su pol¨ªtica econ¨®mica. Yo creo que es un castigo a su pol¨ªtica no/ilustrada (recordar entierro de Tierno, que no hizo reformas econ¨®micas, porque era un anarquista esc¨¦ptico de todo, como Sartre en sus ¨²ltimos tiempos). Los tres ilustrados de psocialismo son Guerra, Mor¨¢n y Pacord¨®fiez. Lo dem¨¢s es fontaner¨ªa.
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