El descenso electoral del PSOE refuerza a los partidarios de no ceder en la negociaci¨®n sobre las bases
Los resultados electorales del pasado 10 de junio, con el mensaje de castigo al PSOE, van a introducir un factor nuevo en las negociaciones hispano-norteamericanas sobre las bases, al reducir el margen de maniobra y las posibles concesiones del Gobierno. Esa es la opini¨®n de medios pol¨ªticos y diplom¨¢ticos que siguen de cerca el proceso negociador sobre la reducci¨®n de la presencia militar estadounidense. Hoy y ma?ana se celebra en Madrid una nueva ronda de conversaciones, con escasas expectativas de avanzar en las negociaciones, al mantenerse las posturas divergentes entre las dos partes.
Los espa?oles, insisten en que la salida del territorio nacional de los F-16 de la base de Torrej¨®n es innegociable. Washington, por su parte, reitera el car¨¢cter vital de tales aviones para la seguridad del flanco sur europeo, y en cualquier caso ,propone demorar la salida hasta que se concreten las negociaciones Este-Oeste sobre armas convencionales.Por otro lado, pese al optimismo-derivado de la reciente entrevista en Reikiaviv entre el secretario de Estado, George Shultz, y el ministro de Asuntos Exteriores, Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, fuentes diplom¨¢ticas espa?olas se?alan que en la reuni¨®n de esta semana en Madrid -la sexta desde que se inici¨® el proceso negociador el 10 de julio del pasado a?o-, no se espera ning¨²n avance espectacular, ni ning¨²n cambio importante en las posiciones de los dos pa¨ªses. En el encuentro Shultz-Ord¨®?ez no hubo propuesta o contraoferta alguna, sino un cambio de impresiones, celebrado en un entorno de distensi¨®n inusual en anteriores reumones, a?aden las mismas fuentes.
En referencia al potencial pol¨ªtico electoral que supone la negociaci¨®n sobre las bases, una cualificada fuente oficial se preguntaba ayer: "Si el PSOE ha perdido mill¨®n y medio de votos en las pasadas elecciones, c¨®mo puede arriesgarse a perder otro mill¨®n de votos, que es lo que pueden costar las bases, con la presi¨®n de Su¨¢rez y de Izquierda Unida en favor de la salida total de los norteamericanos".
Los mismos medios a?aden que la subida electoral del CDS y de Izquierda Unida, favorables al cierre total de las instalaciones norteamericanas en Espa?a, forzar¨¢ al Gobierno a mantener hasta el final su exigencia de que Estados Unidos desmantelen Torrej¨®n y trasladen fuera del territorio nacional el Ala T¨¢ctica 401, integrada por 72 cazabombarderos F-16.
La postura del CDS e IU refuerza parad¨®jicamente, ante los negociadores norteamericanos, la propuesta del Gobierno de Felipe Gonz¨¢lez, cuya moderaci¨®n y pragmatismo le convierten en un aliado fiable de Washington.
Condescendientes y duros
La decisi¨®n ¨²ltima sobre el proceso negociador depende expresamente del presidente del Gobierno, quien mantiene el control del hilo de las negociaciones. Y Felipe Gonz¨¢lez sigue firme en la exigencia de desmantelar Torrej¨®n, con la salida de Espa?a de los F-16, como uno de los puntos con los que se comprometi¨® personalmente en el refer¨¦ndum sobre la permanencia en la OTAN.
Gonz¨¢lez, a?aden, es el responsable de que la postura espa?ola se mantenga firme y coherente, impidiendo que las presiones norteamericanas, especialmente sobre los militares, hayan conseguido abrir brechas entre los sectores clave de la negociaci¨®n.
"Hasta ahora, los americanos no han conseguido meter la cu?a de la divisi¨®n entre los sectores protagonistas de la negociaci¨®n", dijo una cualificada fuente diplom¨¢tica. Otras fuentes situan en 'la parte m¨¢s condescendiente" con las tesis americanas, dentro del arco negociador, a los representantes de Defensa, citando los nombres del general Francisco Veguillas, director general de Pol¨ªtica de Defensa, y a su antecesor en el cargo y en la mesa negociadora, el ante y actual jefe del Estado Mayor de la Armada, Fernando N¨¢rdiz. A continuaci¨®n se ubica al secretario de Estado de Defensa, Eduardo Serra, y al ministro Narc¨ªs Serra.
En el lado m¨¢s duro, se situar¨ªan, seg¨²n los mismos observadores, Alfonso Guerra, por el PSOE; M¨¢ximo Cajal, por el sector diplom¨¢tico; el ministro Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, y el propio Felipe Gonz¨¢lez, cuyas instrucciones son mantener la firmeza de la posici¨®n espa?ola, pero sin caer en la tentaci¨®n de crear antiamericanismo.
Medios diplom¨¢ticos admit¨ªan ayer que, en las ¨²ltimas semanas, se han recibido presiones desde el exterior de algunos pa¨ªses aliados, transmitiendo informalmente el mensaje de preocupaci¨®n de Washington por el agujero defensivo que supondr¨ªa para el flanco sur de la OTAN el desmantelamiento de Torrej¨®n.
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