Oposiciones y fraude
Lo ocurrido al doctor Jos¨¦ Javier Echevarr¨ªa en unas oposiciones, seg¨²n se relata en la carta aparecida en EL PA?S de 21 de junio, no es cosa rara.Para empezar, el baremo de puntuaci¨®n de m¨¦ritos se ha basado en la Seguridad Social sobre los servicios prestados a este organismo.
El enchufismo, revanchismo y nepotismo han servido para que se aleguen formaciones en una determinada especialidad en el extranjero por opositores que, como Dios, han estado en dos sitios al mismo tiempo: en Espa?a, trabajando en la Seguridad Social, y en el extranjero.
Una estancia en el extranjero de seis meses mirando por encima del hombro, en el caso de la cirug¨ªa, del cirujano de prestigio, o una estancia en un congreso, ha valido para decir en el curr¨ªculo: "Formado en la cl¨ªnica del doctor XX", y ha valido, aunque el opositor haya estado en las mejores cl¨ªnicas de Francia, Alemania, Estados Unidos y Reino Unido desconociendo el idioma del pa¨ªs donde ha tenido semejante formaci¨®n profesional.
En este sentido, los miembros en los tribunales representando a los colegios de m¨¦dicos han sido figuras decorativas.
Tambi¨¦n frente a las incompatibilidades de puestos de trabajo, estos colectivos han redactado unos estatutos donde el obstruccionismo y el nepotismo han sido la base de su redacci¨®n, como, por ejemplo, el hecho de que, hoy por hoy, un m¨¦dico no puede estar colegiado m¨¢s que en un solo colegio provincial, aunque por debajo se da permiso a quien se desea.
Por ello no es raro que los ¨¦xitos quir¨²rgicos o m¨¦dicos de centros de la medicina social dependan de los ayudantes, en muchos casos con formaci¨®n superior a sus jefes.- Miguel A. Alonso Artieda.
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