Club serio, no franquista

Madridista desde los a?os finales de la Monarqu¨ªa de Alfonso XIII, y socio durante 20 a?os, el que suscribe -como supongo le sucede al resto de la fiel y gran familia madridista- est¨¢ m¨¢s que harto de o¨ªr que el Real Madrid fue el equipo del r¨¦gimen franquista. Ahora nos sale un joven brit¨¢nico con un trabajo en el que insiste en ello. "Equipo mimado por el r¨¦gimen y que a¨²n conserva un cierto orgullo y se?oritismo...". Bueno. Amigo Duncan: si tan querido era del, r¨¦gimen, ?por qu¨¦ no gan¨® el Madrid un campeonato de Liga durante 15 a?os? Por la sencilla raz¨®n de que en esos tres lustros, el entonces Atl¨¦tico de Aviaci¨®n, el de Bilbao, el Bar?a y el Valencia eran mejores o m¨¢s regulares. Habr¨¢ que recordarle que dos hombres hicieron del Madrid uno de los mejores clubes del mundo: Santiago Bernab¨¦u y Alfredo di St¨¦fano. Y a partir de 1954, el club de Chamart¨ªn empieza a llevarse las ligas a pu?ados, con su incre¨ªble reinado europeo de las cinco copas, sin que Franco y sus ministros tuvieran que ver nada con ello. Simplemente, una acertada pol¨ªtica de fichajes. A ver si ahora resulta que Franco fue el creador de Bernab¨¦u, un hombre que lo fue todo en el Madrid: jugador, directivo y, durante 35 a?os, presidente, con una clara visi¨®n de futuro. Gracias a ¨¦l, en los a?os treinta se trajo a la maravilla de Luis Regueiro y al tr¨ªo Zamora-Ciriaco-Quincoces (as¨ª, de corrido), entre otras muchas figuras del mejor f¨²tbol nacional e internacional. El Madrid siempre fue un club serio, admirablemente administrado y con gran potencia econ¨®mica. Y como dec¨ªa mi amigo Garc¨ªa Lirio, "todos empezaron con dos reales de tabaco". Un gran club, un gran equipo de f¨²tbol; antes, con y despu¨¦s de Franco.Durante la Rep¨²blica, un semanario espl¨¦ndidamente editado, As, publicaba unas divertidas historietas salidas de la pluma de Mart¨ªnez de Le¨®n (el creador de Oselito), en las que se representaba a los tres mejores equipos de ahora y siempre en las figuras de un le¨®n con boina (el Atl¨¦tico de Bilbao), un jugador con la barretina catalana (el Barcelona) y a un elegante con chistera (el Madrid), signo de su potencia y prestancia. Franco a¨²n estaba lejos, si acaso dirigiendo la Academia General Militar de Zaragoza. Una ¨²ltima objeci¨®n: el f¨²tbol, en Espa?a, lleva apasionando a la gente hace m¨¢s de 60 a?os. Lo de "droga social, sopor¨ªfero pol¨ªtico y v¨¢lvula de escape" es un t¨®pico como una catedral. Y el Cara al sol se cantaba -no hab¨ªa m¨¢s remedio- en los estadios, en Ios colegios y en el descanso de las corridas de toros, y con el brazo en alto, de lo que s¨®lo se libraba el toro.- Miguel Dur¨¢n.