Los salarios pueden crecer m¨¢s que el IPC, seg¨²n CEOE

Para medios de la patronal CEOE, los objetivos que se perfilan resultan factibles y compatibles con aumentos salariales superiores al 3% de inflaci¨®n esperada, mientras que los sindicatos prefieren de momento no pronunciarse. Seg¨²n Jos¨¦ Folgado, director de Econom¨ªa de la patronal, el "4% es factible tambi¨¦n en 1988, siempre y cuando la pol¨ªtica de concertaci¨®n logre antes un consenso expreso o t¨¢cito sobre el comportamiento para los tres pr¨®ximos a?os de las rentas salariales y empresariales, sobre el marco para la inversi¨®n p¨²blica y privada y sobre una flexibilidad laboral que tenga en cuenta la necesidad tanto de crear como de destruir empleo que registran en cada momento las empresas".

"Aunque es vital para mantener el proceso inversor que los salarlos reales crezcan por debajo de la productividad", apunt¨® Folgado, "tambi¨¦n el citado objetivo de un 4% requerir¨¢ evitar la ca¨ªda de la tasa de aumento del consumo privado, para lo cual podr¨ªan admitirse aumentos de salarios nominales algo por encima de la inflaci¨®n esperada".

"Una pol¨ªtica m¨¢s decidida e, incluso agresiva de fomento de las exportaciones y promoci¨®n de las inversiones en el exterior", dijo tambi¨¦n, "contribuir¨ªa a reequilibrar el sector exterior y a que las fuertes entradas de divisas no provoquen problemas de control monetario".

Por su parte, Miguel ?ngel Ord¨®?ez, secretario de imagen de la UGT, prefiri¨® no pronunciarse hasta ver los presupuestos y el razonamiento que los acompa?e. Pero record¨® que la idea del sindicato socialista es no reducir la necesaria concertaci¨®n social a principios generales, sino concretar un amplio temario que sirva para realizar el objetivo principal de crear empleo y de aspirar a unas condiciones sociales similares a las disfrutadas por los trabajadores en la CE.

Fuentes de CC OO se remitieron a las ponencias presentadas para su IV Congreso Confederal, una de las cuales se?ala que los presupuestos del Estado deben contener los clementos claves para una pol¨ªtica econ¨®mica progresista orientada a "un reparto de la renta nacional favorable a los trabajadores, que impulse el papel del sector p¨²blico como creador de riqueza y empleo e intervenga para corregir las desigualdades sociales".