Kiyoshi Yamaoka
Un bohemio japon¨¦s afincado en San Lorenzo de El Escorial
La historia de Kiyoshi Yamaoka, un pintor japon¨¦s de 46 a?os, tiene todo lo necesario para considerarle un bohemio. Lentamente ha triunfado en su pa¨ªs y ahora comienza a hacerlo en Estados Unidos. Enamorado de Espa?a desde los 21 a?os, al ver la pel¨ªcula Los Tarantos y una exposici¨®n de Picasso, decidi¨® venir a nuestro pa¨ªs a los 27 a?os. Actualmente dirige una galer¨ªa de arte en San Lorenzo de El Escorial y est¨¢ preparando varias exposiciones individuales en Tokio, Osaka, Nueva York y Madrid.
Nacido en Tokio en 1941 en el seno de una modesta familia, estudi¨® Bachillerato y fue un buen jugador de b¨¦isbol. A los 18 a?os se interes¨® por la fotograf¨ªa y acudi¨® como aprendiz al estudio de Kiyima, un maestro de la fotograf¨ªa publicitaria japonesa, y a los tres a?os empez¨® a colaborar como free-lance en varias agencias de publicidad. A pesar de su ¨¦xito como fot¨®grafo, Yamaoka lo dej¨® y se dedic¨® a su gran pasi¨®n desde que era ni?o: la pintura. En 1969, despu¨¦s de realizar un viaje por varios pa¨ªses europeos, lleg¨® a Espa?a y la encontr¨® tal y como se la hab¨ªa imaginado en Jap¨®n. "Me identifiqu¨¦ tanto con esta tierra, que llegu¨¦ a pensar que Dios se hab¨ªa equivocado conmigo y que yo ten¨ªa que haber nacido aqu¨ª". Nada m¨¢s llegar a Madrid fue a la Escuela de Bellas Artes de San Fernando, y empez¨® a copiar a algunos maestros, como Rubens, para comprender mejor la t¨¦cnica de su dibujo. Cuando estaba estudiando en San Fernando, obtuvo el primer premio de grabado de la Fundaci¨®n Rodr¨ªguez Acosta de Granada, sobre un tema de Garc¨ªa Lorca.
En 1974 prepar¨® su primera exposici¨®n individual en la galer¨ªa Bungel-Shiju, de Tokio, y all¨ª vendi¨® toda su producci¨®n de los ¨²ltimos cinco a?os. En Espa?a le costaba exponer y por eso ten¨ªa que abrirse camino en otros lugares. En 1979 hizo su segunda exposici¨®n en la galer¨ªa Seibu, de Tokio, y desde entonces ha expuesto con regularidad en las mejores galer¨ªas de su pa¨ªs. Descubierto por uno de los pintores contempor¨¢neos m¨¢s importantes de Jap¨®n, Takeo Yamaguchi (1902-1984), mantuvo con ¨¦l una relaci¨®n fruct¨ªfera, que ha durado 10 a?os. Yamaoka ha preferido avanzar lentamente, sin prisa. "Yamaguchi", dice, "adem¨¢s de un buen pintor abstracto, era un fil¨®sofo, y me dec¨ªa que un gran pintor era como un ¨¢rbol que deb¨ªa tener buenas ra¨ªces para que, aunque soplaran fuertes vientos, no te hicieran caer y pudieras sobrevivir a los continuos vaivenes de las modas art¨ªsticas", y a?ade: "Siempre me comentaba que lo fundamental en el arte es ver y tocar, ver es la sensaci¨®n que nos suscita nuestro entorno, y tocar es pintar sobre el lienzo".
Kiyoshi Yamaoka asegura que su car¨¢cter es muy barroco, y por eso se identifica con los pintores espa?oles Vel¨¢zquez, el Greco y Goya, aunque tambi¨¦n le interesan Tapi¨¨s, Dar¨ªo Villalba y, sobre todo, Picasso.
Recientemente ha iniciado su aventura americana, y actualmente su obra puede verse en la galer¨ªa Vorpal, de Nueva York, en el Soho, frente a la galer¨ªa de Leo Castelli. El director de Vorpal, Dale Macgear, le ha asegurado que dentro de poco tiempo sus cuadros colgar¨¢n en los mejores museos de arte moderno, y le ha firmado un contrato para una nueva exposici¨®n en la primavera de 1988, coincidiendo con otras dos en Osaka y Tokio.
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