'Au revoir les enfants', primera obra redonda
Un gran festival no se funda ¨²nicamente en las buenas pel¨ªculas, pero no puede vivir sin ellas. La Mostra de Venecia ya tiene su primer filme capaz de hacernos olvidar los vistos anteriormente, la primera obra redonda. Se trata de Au revoir les enfants, del franc¨¦s Louis Malle. La acci¨®n transcurre en 1944, en una Francia todav¨ªa ocupada, pero que sabe ya que los alemanes pronto deber¨¢n retirarse y que sabe y teme que ¨¦ste sea el momento m¨¢s peligroso.
Para los alumnos de una escuela religiosa alejada de Par¨ªs, la rutina escolar, hecha de clases, juegos, fr¨ªo, mercado negro y escasa y mala comida, no se romper¨¢ hasta que lleguen a la escuela tres nuevos chicos: son jud¨ªos que uno de los religiosos procura esconder de la Gestapo. Su adaptaci¨®n es dif¨ªcil; los compa?eros les someten a todas las pruebas t¨ªpicas de que son v¨ªctimas los novatos, pero pronto nace entre uno de ellos y Julien, el h¨¦roe de la ficci¨®n, una amistad fundada en gustos y aventuras comunes.Desp¨²es de 10 a?os en Estados Unidos desarrollando una carrera at¨ªpica, que alterna cintas de presupuesto alto y gran difusi¨®n con documentales casi familiares, Louis Malle regresa a Francia, y lo hace volviendo a interesarse por el per¨ªodo que trat¨® en Lacombe Lucien, de 1974. Entonces logr¨® darnos un buen retrato de un joven colaboracionista, retrato desprovisto de demagogia. Ahora este colaboracionista es un personaje muy secundario, culpable de? drama final, pero v¨ªctima tambi¨¦n de una situaci¨®n social que le condena a la marginalidad. La atenci¨®n de Malle se centra ahora en unos muchachos de buena familia que ven c¨®mo Petain y Hitler se introducen en su mundo. El relato se inspira en un hecho real que pertenece a la biograf¨ªa del director. ?l mismo lo explica: "Au revoir les enfants se basa en el recuerdo m¨¢s dram¨¢tico de mi infancia. En 1944 ten¨ªa 11 a?os y estaba interno en un colegio cat¨®lico cercano a Fontainebleau. Me intrig¨® mucho el compa?ero llegado despu¨¦s de iniciado el curso. Era distinto, secreto. Empec¨¦ a conocerlo, a amarlo, pero aquella ma?ana en que la Gestapo irrumpi¨® en la escuela todo se vino abajo. Quiz¨¢ deba situar en aquel momento las ra¨ªces de mi vocaci¨®n de cineasta. Es mi manera de ser fiel, de mantener un punto de referencia con el pasado. Hubiera debido ser el tema de mi primera pel¨ªcula, pero dudaba, no me sent¨ªa seguro".
Homenaje a Charlot
En 1987 Malle es ya un narrador segur¨ªsimo y capaz de transmitir toda la emoci¨®n, drama y lirismo que hay en la historia. Hay algunas secuencias magistrales, como la de los ni?os perdidos en el bosque o aprendiendo a tocar jazz a cuatro manos cuando el resto de la escuela permanece en un refugio mientras espera que pase una amenaza de bombardeo, pero sobre todo es impresionante el momento en que ni?os y profesores asisten a una proyecci¨®n de El inmigrante, de Chaplin, homenaje y lectura a un tiempo de la figura de Charlot.Dentro de la semana de la cr¨ªtica, se ha presentado el primer largometraje comercial de Carlo Mazzacurati, que ha supuesto una agradable sorpresa. Se titula Notte italiana y es lo que podr¨ªamos llamar una comedia policiaca, una narraci¨®n un poco simenoniana situada en un pueblecito de la desembocadura del Po.
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