Conversaciones en las alturas

El ministro de Asuntos Exteriores, Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, al insistir a George Shultz en la seriedad espa?ola para cumplir compromisos adquiridos, como su colaboraci¨®n en la OTAN, recordaba al secretario de Estado la entrevista que ¨¦ste mantuvo con Felipe Gonz¨¢lez hace dos a?os, el 26 de septiembre de 1985, en el mismo hotel en el que ahora estaban, en el piso 34 del UN Plaza.

En aquella ocasi¨®n, el presidente del Gobierno, que viaj¨® a Nueva York para intervenir ante la Asamblea General de la ONU, anunci¨® a Shultz su decisi¨®n de convocar el refer¨¦ndum sobre la permanencia de Espa?a en la OTAN. Felipe Gonz¨¢lez le prometi¨® que ¨¦l y su Gobierno echar¨ªan toda la carne en el asador para ganar la consulta.

Seg¨²n testigos presenciales de aquella restringida reuni¨®n, la rotundidad con la que Gonz¨¢lez anunci¨® a Shultz que se celebrar¨ªa el refer¨¦ndum fue similar a la que utiliz¨®, segundos m¨¢s tarde, advirti¨¦ndole que superado el escollo del refer¨¦ndum, habr¨ªa que proceder a la reducci¨®n de las bases.

En aquella ocasi¨®n, seg¨²n las mismas fuentes, Gonz¨¢lez recalc¨® a Shultz que no se trataba de una salida de los americanos de Espa?a, sino de una mera reducci¨®n, y que ¨¦l nunca har¨ªa antiamericanismo en su pa¨ªs. Shultz pareci¨® entender claramente la exposici¨®n del presidente del Gobierno espa?ol. La entrevista mantenida en secreto el pasado mi¨¦rcoles entre Fern¨¢ndez Ord¨®?ez y el embajador Reginald Bartholomew se celebr¨® en la suite del ministro espa?ol, en el piso 35 de su hotel. Posteriormente, el embajador norteamericano y Cajal se reunieron en las habitaciones de Bartholomew. Todos ellos residen en el gigantesco hotel UN Plaza, enfrente de las ONU.

El secreto y confidencialidad de tales encuentros lo facilitaban las enormes dimensiones del hotel y la extraordinaria concentraci¨®n de personalidades internacionales que estos d¨ªas llenan los hoteles de Manhattan debido a la apertura de la conferencia general de la ONU.