La Prensa sovi¨¦tica prosigue las denuncias contra la corrupci¨®n en la polic¨ªa

Dos asuntos de corrupci¨®n que afectaron a funcionarios del Ministerio del Interior sovi¨¦tico, en la ciudad de Mosc¨² y en la de Breznev (en la rep¨²blica aut¨®noma t¨¢rtara), aparecieron ayer en Prensa central sovi¨¦tica, testimoniando, en opini¨®n de los observadores, la intenci¨®n de continuar la campa?a por la disciplina y el orden en las filas del aparato policial sovi¨¦tico. La coincidencia y el hecho de que se trate de casos relativamente antiguos abonan esta idea.El ¨®rgano oficial del Partido Comunista de la Uni¨®n Sovi¨¦tica (PCUS), el diario Pravda, informa de la desarticulaci¨®n de una red clandestina infiltrada en a organizaci¨®n policial encargada de la vigilancia del hotel (Cosmos, uno de los m¨¢s lujosos de la capital, que fue construido por una empresa francesa para los Juegos Ol¨ªmpicos de 1980. Pravda revela que un agente encargado del trabajo en la Uni¨®n de las Juventudes Comunistas se hab¨ªa ahogado en la piscina del hotel en estado de embriaguez.

Banquetes para extranjeros

El jefe de la organizaci¨®n policial, A. Kamyshnikov, actualmente expulsado de la polic¨ªa, hab¨ªa introducido a decenas de ciudadanos procedentes de rep¨²blicas asi¨¢ticas y el C¨¢ucaso en el Cosmos como si fueran agentes. Esta mafia organizaba banquetes para los extranjeros y controlaba los bares en divisas, al tiempo que comet¨ªa otras violaciones de la ley y la disciplina.Pravda relata que una funcionarla policial, Natalia Averina, que se atrevi¨® a denunciar la situaci¨®n, fue represaliada por ello. Seg¨²n el peri¨®dico, Kamyshnikov continu¨® en el cargo durante tres meses, pese a haber sido puesto en evidencia. Tales hechos suced¨ªan en la primavera de 1985, se?ala el peri¨®dico.

Por otra parte, el peri¨®dico Sozialistisheskaia Industria relata un caso de industria clandestina en la ciudad de Breznev cuyos or¨ªgenes se remontan a los a?os setenta, cuando la localidad ten¨ªa el nombre de Naberezhriyye Chelny, que cambiar¨ªa despu¨¦s a la muerte del dirigente Leonid Breznev, en noviembre de 1982.

El caso afectaba a una empresa local de punta cuya actividad ilegal era realizada en complicidad con miembros del Ayuntamiento y la colaboraci¨®n policial, incluida la de la Organizaci¨®n para la Lucha contra los Robos de la Propiedad Socialista (OBJSS).