Distribuci¨®n de cartillas de racionamiento en Alzira

Los problemas de organizaci¨®n del abastecimiento de comida y la aparici¨®n de peque?os brotes de especulaci¨®n han obligado a implantar un sistema de cartillas de racionamiento entre la poblaci¨®n de Alzira, que cuenta con 40.000 habitantes, tras el desbordamiento del r¨ªo J¨²car el pasado mi¨¦rcoles. En Orihuela comenzaron ayer las tareas de limpieza, y las aguas s¨®lo inundaban ya las zonas cercanas a la desembocadura del Segura. La evaluaci¨®n provisional de los da?os en la Comunidad Valenciana se eleva a 100.000 millones de pesetas. La indignaci¨®n y las protestas presiden la vida en las comarcas afectadas por las inundaciones.

Varios miles de personas soportaron ayer domingo en Alzira colas interminables con el fin de conseguir la cartilla de racionamiento que distribu¨ªa el Ayuntamiento entre los 13.000 cabezas de familia censados en esta poblaci¨®n de 40.000 habitantes, seg¨²n informa Xavier EspanyaEl malestar era patente entre los afectados, que desde primera hora de la ma?ana se aglomeraban en la plaza Mayor. Los problemas para abastecer la ciudad y la necesidad de evitar peque?os actos de picaresca y especulaci¨®n han obligado a poner en marcha el sistema de cartillas, que se mantendr¨¢ durante varios d¨ªas.La Consejer¨ªa de Sanidad ha enviado una circular a todos los ayuntamientos afectados por la riada en la que recuerda la prohibici¨®n de venta ambulante de alimentos y la necesidad de control sanitario.

El lodo sigue presente en las calles de Alzira y el hedor resultaba insoportable, especialmente en las peque?as callejas de la poblaci¨®n, donde se almacenaban los alimentos en mal estado procedentes de las tiendas de comestibles.

En cambio, el pronto restablecimiento del suministro de energ¨ªa el¨¦ctrica, as¨ª como de? servicio telef¨®nico en buena parte de la ciudad han contribuido a aliviar las precarias condiciones de vida que est¨¢n soportando la mayor¨ªa de familias alcire?as. La riada del pasado 4 de noviembre ha asestado un duro golpe a sus econom¨ªas, que resultaron mermadas sensiblemente en la pantanada de 1982.

Desmoralizaci¨®n

Algunos damnificados como Jos¨¦ Francisco Alonso Soler, propietario de un bar en el centro, ha de reponer nuevamente todos sus utensilios cuando debe una p¨®liza de dos millones de pesetas al Banco Hipotecario. Si hace cinco a?os las aguas alcanzaron en su establecimiento m¨¢s de tres metros de altura, ahora la cota ascendi¨® a metro y medio El da?o econ¨®mico cabe considerarlo grande, pero mucho m¨¢s han sufrido los habitantes de esta poblaci¨®n en su maltrecha moral. "Esta riada nos ha hecho polvo", manifestaba Alonso; "muchos nos cuestionamos ahora si merece la pena abrir los establecimiento empezando de nuevo". Alonso, como todos los vecinos de Alzira, est¨¢ convencido de que la autopista A-7 fue la principal causante de su cat¨¢strofe.Para ma?ana, martes, los afectados han previsto concentrarse en la plaza Mayor con el fin de programar una marcha de protesta contra la autopista. El alcalde, Francisco Blasco, considera vital para la recuperaci¨®n de Alzira que act¨²en con rapidez los t¨¦cnicos del Consorcio de Compensaci¨®n de Seguros en la peritaci¨®n de los da?os. Los afectados deben percibir en el plazo de un mes, a criterio de Blasco, al menos alguna cantidad a cuenta del total de la indemnizaci¨®n Cabe recordar que en las inundaciones de 1982 los damnificados tardaron en cobrar el importe de su p¨®liza de seguros entre seis y doce meses de tiempo.

Por otra parte, en Orihuela y el resto de la comarca alicantina de La Vega Baja comenzaron ayer los trabajos de limpieza. El agua hab¨ªa desaparecido ayer del casco urbano de Orihuela, ciudad que cuenta con una poblaci¨®n de 45.000 habitantes, pero inundaba todav¨ªa zonas de huerta y los niveles m¨¢s altos se registraban en las inmediaciones de la desembocadura del Segura. Las primeras estimaciones de da?os facilitadas por la Generalitat valenciana, elevan la cifra a unos 100.000 millones de pesetas.

De esta cantidad, cerca de 30.000 millones corresponden a da?os en infraestructuras p¨²blicas. Otros 20.000 millones de pesetas de p¨¦rdidas se centran en la agricultura, en especial en los c¨ªtricos y hortalizas. Las previsiones meteorol¨®gicas anunciaban para hoy lluvias, pero de poca intensidad, en las ¨¢reas afectadas por las riadas.