La huella de una sociedad

La obra del escritor mexicano Carlos Fuentes, uno de los representantes m¨¢s destacados de la nueva narrativa latinoamericana, tiene como constante la presencia de la sociedad mexicana de su tiempo. Dicha sociedad, puesta en entredicho desde una ¨®ptica que insiste en la identidad del mexicano y la de su patria, est¨¢ condicionada por cuestiones hist¨®ricas y sociales.Su ¨²ltima novela, Crist¨®bal Nonato, aparecida hace unos d¨ªas, sucede, con frecuentes saltos atr¨¢s, en el a?o 1992, coincidiendo con la celebraci¨®n del V Centenario del Descubrimiento de Am¨¦rica.

Es el mon¨®logo de un personaje concebido, pero todav¨ªa no nacido, como recoge el propio t¨ªtulo de la obra. En la anterior novela, Gringo viejo (1985), Fuentes volv¨ªa a evocar el tema de la revoluci¨®n de 1910 -tratado ya en otra de sus grandes creaciones, La muerte de Artemio Cruz (1962)- y abordaba la problem¨¢tica de la intromisi¨®n norteamericana en los asuntos mexicanos.

Con anterioridad, Carlos Fuentes ha publicado otras novelas, en las que se mantiene su obsesi¨®n por la identidad colectiva mexicana: La regi¨®n m¨¢s transparente (1958), galardonada con el Premio Internacional Alfonso Reyes; Las buenas conciencias (1959); Aura (1962); Zona sagrada (1967); Cambio de piel (1967), que obtuvo el Premio Biblioteca Breve; Cumplea?os (1969); Terra nostra (1975); La cabeza de la hidra (1978), y Una familia lejana (1980).

Carlos Fuentes ha escrito tambi¨¦n varios libros de relatos breves: Los d¨ªas enmascarados (1954), Cantar de ciegos (1964) y Agua quemada (1981).

Como pensador son frecuentes sus colaboraciones period¨ªsticas, con opiniones sobre temas de actualidad,, han de destacarse tambi¨¦n sus libros de ensayo La nueva novela hispanoamericana (1969), Casa con dos puertas (1970) y Cervantes, o la cr¨ªtica de la lectura (1976).

Tambi¨¦n ha cultivado Carlos Fuentes la creaci¨®n teatral en obras como El tuerto es el rey (1970) y Orqu¨ªdeas a la luz de la luna (1982).

Fuentes tuvo la intenci¨®n de acercarse al cine y de esos intentos han quedado los guiones de Las dos Elenas, Una alma pura y El gallo de oro.