El joven de M¨¢laga que se atrincher¨® 18 horas en su casa est¨¢ internado en un hospital

Francisco Garc¨ªa Ant¨²nez, el joven malague?o que mat¨® a su mujer, Antonia Pacheco Garc¨ªa, y se atrincher¨® en su vivienda armado con un rifle durante 18 horas, se encuentra internado, bajo custodia policial, en el hospital Carlos Haya, de M¨¢laga. Garc¨ªa Ant¨²nez result¨® herido de bala en el muslo y la rodilla derechos cuando seis guardias civiles asaltaron su casa en el poblado de Cerralba, de Pizarra (M¨¢laga).

Garc¨ªa Ant¨²nez, de 27 a?os, se atrincher¨® en su casa con un rifle del calibre 22 a las once de la noche del lunes, mat¨® poco despu¨¦s a su mujer, de 25, y retuvo a su cu?ada, Ana Mar¨ªa Pacheco, de 14 a?os, hasta que los guardias civiles asaltaron la vivienda a las cinco de la tarde del martes. Ana Mar¨ªa Pacheco fue rescatada sin da?o, aunque presa de una crisis nerviosa. Adem¨¢s, la chica recibi¨® numerosos golpes en la cabeza durante su retenci¨®n.La cu?ada del parricida fue trasladada al hospital Carlos Haya, donde fue atendida por un neurocirujano que no le encontr¨® ninguna lesi¨®n, por lo que regres¨® a su domicilio.

Ayer se conocieron nuevos detalles sobre la muerte de Antonia Pacheco. Seg¨²n la reconstrucci¨®n de los hechos, que se realiz¨® ayer, el crimen se produjo en la misma noche del lunes, poco despu¨¦s de que el joven se encerrase en su casa. Antonia debi¨® llamar la atenci¨®n de su marido y ¨¦ste le golpe¨® en la cabeza con un palo. Antonia, ya herida, intent¨® huir por el patio trasero de la vivienda, siendo abatida de tres tiros por la espalda.

Posteriormente, Francisco Garc¨ªa Ant¨²nez la arrastr¨® hasta un sof¨¢ en el interior de la vivienda, cubri¨¦ndola con mantas y almohadas.

Ana Mar¨ªa Pacheco no presenci¨® los hechos, ya que, al parecer, estaba encerrada en otra habitaci¨®n y, posteriormente, su cu?ado no le dej¨® acercarse al sof¨¢. Antes de matar a su esposa, el j¨®ven amarr¨® a su cu?ada al coche en el patio trasero de la vivienda.

Ayer se celebr¨® en el cementerio de la localidad malague?a de Pizarra el sepelio de Antonia Pacheco, al que acudi¨® la pr¨¢ctica totalidad de los 7.000 habitantes de la localidad.

A hombros de familiares y amigos, el cad¨¢ver de Antonia Pacheco fue sacado de la casa de sus padres y conducido en cortejo por las calles de la localidad, entre el silencio de los vecinos y algunas expresiones aisladas de hostilidad hacia el parricida.