Carlos Carrasco-Mu?oz deVera,

uno de los pioneros del movimiento ecologista en Espa?a, es el autor de un proyecto para la creaci¨®n de un parque internacional en los arribes del Duero, que abarca 17 municipios de las provincias de Zamora y Salamanca, en Espa?a, y el departamento del Alto Douro y parte de parque de Montesinhos, en Portugal. Vallisoletano, de 48 a?os, dej¨® el ejercicio activo de la abogac¨ªa para especializarse en r¨¦gimen jur¨ªdico de recursos naturales. Es tambi¨¦n autor del plan especial del parque de Do?ana y de varias gu¨ªas sobre parques y recursos naturales, y de varios libros especializados, entre ellos un manual cient¨ªfico, t¨¦cnico y legislativo sobre la gesti¨®n del medio ambiente, que ha sido adquirido por m¨¢s de 400 ayuntamientos espa?oles. Su af¨¢n ecologista le llev¨®, en 1970, a espantarle los urogallos al entonces ministro de Informaci¨®n y Turismo, Manuel Fraga, cuando ¨¦ste realizaba incursiones cineg¨¦ticas por la sierra de los Ancares. Poco despu¨¦s se querell¨® contra el presidente del Gobierno de aquellos a?os, Luis Carrero Blanco, por un delito contra la higiene p¨²blica, relacionado con la contaminaci¨®n atmosf¨¦rica que sufr¨ªa Madrid por el plomo en la gasolina. Luego fue detenido en Le¨®n en 1975 cuando quiso organizar una mesa redonda con 40 alcaldes de la comarca de la Coyanza sobre centrales nucleares. Pasada la transici¨®n fue nombrado delegado del Medio Ambiente en Madrid, pero fue destituido en 1980. De su paso por la capital espa?ola, Carlos Carrasco tiene a gala el haber parado temporalmente un buen n¨²mero de calefacciones para evitar el incremento del nivel de contaminaci¨®n. "Me echaron por mi actividad en favor de la limpieza del medio ambiente madrile?o", opina. Incansable, actualmente est¨¢ dedicado a la planificaci¨®n del medio f¨ªsico dentro de las nuevas t¨¦cnicas de planificaci¨®n integral en Segovia, y no ahorra cr¨ªticas para los grupos ecologistas de hoy, a los que califica de sal¨®n y llama "ecolol¨®s". "Son ecologistas", afirma Carrasco, "del verde sint¨¦tico, del pajarito que p¨ªa, de las focas del ?rtico y de las ballenas allende los mares, pero no se ocupan de que a cada madrile?o, por a?o, le toca respirar 25 kilos de holl¨ªn y 15 kilos de azufre. Actualmente, las asociaciones ecologistas est¨¢n calladas por las subvenciones que les concede el Gobierno del PSOE".