Alfons¨ªn y los militares

Cuatro a?os despu¨¦s de que la desacreditada Junta argentina cediese el poder a los civiles, los militares disponen todav¨ªa de un enorme poder para chantajear al Gobierno de Alfons¨ªn.Las fricciones entre el poder civil y el estamento militar eran inevitables desde el principio en Argentina, a la vista de la obstinada opini¨®n de las fuerzas armadas de que son ellas las salvadoras de la patria de las garras del comunismo mediante la guerra sucia.

En Espa?a, el ejemplo m¨¢s relevante de una transici¨®n pac¨ªfica de una dictadura militar a un Gobierno democr¨¢tico, los militares demostraron ser mucho m¨¢s dif¨ªciles de manejar que en Argentina durante los seis primeros a?os de? proceso, con dos intentos menores de golpe de Estado y uno m¨¢s grave en 1981. Se hizo todo tipo de concesiones para apaciguar a las Fuerzas Armadas, incluso en la Constituci¨®n, en la que se les concede un papel amplio en exceso. Pero todas estas concesiones ten¨ªan como objetivo final procurar un cambio de r¨¦gimen, pac¨ªfico.

Sin embargo, el presidente Alfons¨ªn tiene que enfrentarse con muchos m¨¢s problemas que los que ten¨ªa la Espa?a posfranquista. Por otra parte, Argentina no cuenta con la instituci¨®n imparcial de la Monarqu¨ªa que sirva de puente con los ej¨¦rcitos. Por ello es vital para Alfons¨ªn conservar el apoyo de todos los partidos, porque s¨®lo podr¨¢ hacer frente a los militares si tiene a su pa¨ªs detr¨¢s de ¨¦l.

, 7 de enero