'Jarrapellejos', el filme que representa a Espa?a en el Festival de Berl¨ªn, estrenado en C¨¢ceres

"?sta es la primera pel¨ªcula americana del cine espa?ol". "Lo que acabamos de ver est¨¢ al borde del soplo de Lo que el viento se llev¨®". "Yo no s¨¦ por qu¨¦ me ha gustado tanto, pero me ha gustado". "Es muy bonita". "Pues a m¨ª me parece que falta un cierto ritmo". "Ten¨ªa que ser m¨¢s localista para que se viera m¨¢s el paisaje de Extremadura. Tales fueron algunas de las manifestaciones recogidas entre los m¨¢s de 1.500 espectadores de C¨¢ceres y cercan¨ªas que asistieron el pasado lunes al estreno mundial de la para la Jarrapellejos, dirigida por Antonio Gim¨¦nez Rico. El filme representar¨¢ a Espa?a en la secci¨®n competitiva del Festival de Cine de Bert¨ªn, que se inicia el pr¨®ximo viernes, 12 de febrero.

Jarrapellejos est¨¢ basada en la novela del m¨¦dico-escritor Felipe Trigo, nacido el siglo pasado en Villanueva de la Serena (Badajoz), y desaparecido, tras una obra narrativa pol¨¦mica y fundamental, de un pistoletazo que ¨¦l mismo se dispar¨®.En la dedicatoria de Jarrapellejos se lee: "La vida no es de marfil, sino de ang¨¦lica bestialidad de carne y hueso". En la ¨²ltima entrevista que concedi¨® antes de suicidarse, Trigo, el novelista afrodisiaco, declar¨® que el rasgo definitorio de su personalidad podr¨ªa esbozarse as¨ª: "La violencia de la felicidad alternada con la violencia del dolor, en tal forma que, unas veces por m¨¢s, otras por menos nunca soy dichoso".

Clar¨ªn opina

Leopoldo Alas Clar¨ªn coment¨® a prop¨®sito del libro de Trigo Las ingenuas: este se?or "es un corruptor de menores... y del idioma". Moralidad, inmoralidad, socialismo fundado en la revisi¨®n del concepto del amor y de la pareja, lujuria del poder, cr¨ªmenes del poder absoluto y en definitiva, complicidad de una sociedad enferma de la necesidad y de la abulia a la postre. Todos estos elementos, humanos o de su obra, se funden en Jarrapellejos.

Gim¨¦nez Rico, desde que fuera estudiante en Valladolid, en la d¨¦cada de los cincuenta, ya ten¨ªa en la cabeza esta obra, prohibida en aquel entonces por la censura; pero s¨®lo ahora ha sido posible convertirla en im¨¢genes. "He querido ser fiel a esta obra monumental y compleja sin traicionar el instrumento cinematogr¨¢fico", explica Gim¨¦nez Rico. Rico piensa que "la crisis del cine, en parte", se debe a que "el cine actual no se hace con historias, sino con ideas y con tecnolog¨ªa. Yo soy un narrador y no un creador de climas, y Jarrapellejos es una historia que narro".

El estreno mundial en el teatro Astoria de C¨¢ceres fue una fiesta de guardar en la ciudad extreme?a. Antes y despu¨¦s de la representaci¨®n, hombres, mujeres sobre todo, ni?os, pero tambi¨¦n j¨®venes anhelantes con papel y bol¨ªgrafo en ristre, asaltaban materialmente a los actores. Lydia Bosch no daba de s¨ª; Antonio Ferrandis, el cacique de Jarrapellejos, declaraba estar horrorizado del calibre canallesco de su personaje, y firmaba y abrazaba; Jos¨¦ Coronado, una revelaci¨®n en el filme, interpreta el papel que Gim¨¦nez Rico le ofreci¨® de entrada a Miguel Bos¨¦; pero ¨¦ste le recomend¨® al compa?ero de su hermana Paola.

Escritor inmoral

Las autoridades extreme?as financiaron la pel¨ªcula con el Ministerio de Cultura y el actor Juan Luis Galiardo; as¨ª contrarrestaron el mal gusto de no pocos particulares coterr¨¢neos de Felipe Trigo, que le hicieron la vida imposible al equipo durante el rodaje simplemente porque a¨²n se odia al inmoral escritor.

Jarrapellejos es el d¨¦cimo filme de Gim¨¦nez Rico, nacido en Burgos en 1938. Estudi¨® m¨²sica, piano y periodismo. Tras una etapa dedicada a la cr¨ªtica, la radio y el periodismo cinematogr¨¢ficos, inici¨® su carrera en el cine como ayudante de direcci¨®n en 1963. Entre sus pel¨ªculas destacan Vestida de azul (1983) y El disputado voto del se?or Cayo (1986), basada en una novela de Delibes.