Georgios Vasiliu elegido nuevo presidente de Chipre

ENVIADO ESPECIAL, El candidato independiente apoyado por los comunistas Georgios Vasiliu, de 56 a?os, fue elegido ayer nuevo presidente de la Rep¨²blica de Chipre al derrotar, en la segunda vuelta de los comicios, al derechista Glafkos Clerides, de 68 a?os, que admiti¨® la derrota y felicit¨® a su rival. Vasiliu, un economista que se ha hecho millonario con una empresa de investigaci¨®n de mercado, era un perfecto desconocido en pol¨ªtica hace s¨®lo unos meses. Ha superado a Clerides por m¨¢s de 10.000 sufragios, cm el 51,63% de los emitidos ayer, tras un espectacular codo a codo, que tard¨® varias horas en resolverse.

"No hay vencedores ni vencidos", dijo el nuevo jefe de Estado al hacerse p¨²blicos los resultados, "s¨®lo una victoria de la democracia". La re?ida batalla se decidi¨® por los partidarios del todav¨ªa presidente, el centroderechista Spyros Kyprianu, descolgado de la carrera siete d¨ªas antes, y que dio a los suyos liberad de voto.Unos 360.000 grecochipriotas elig¨ªan ayer, no s¨®lo a su jefe de Estado sino tambi¨¦n al interlocutor para el di¨¢logo con la minor¨ªa turcochipriota, asentada en el norte de la isla, en el 37% de la misma, y con la protecci¨®n militar de Turqu¨ªa desde 1974.

El resultado de la elecci¨®n se presum¨ªa tan ajustado que los candidatos pusieron en juego toda su artiller¨ªa pesada, incluyendo los ataques personales, para inclinar la balanza a su favor. Vasiliu se gan¨® el apoyo de los socialistas de Vasos Lisarides (9,22% en la primera vuelta) gracias a la promesa de que no aceptar¨¢ una soluci¨®n de la .cuesti¨®n nacional" que no presuponga la retirada de las tropas y los colonos turcos del Norte antes de que se forme un Gobierno provisional, de que fortalecer¨¢ la identidad nacional griega, de que se reconocer¨¢n las tres libertades (de movimiento, de implantaci¨®n y de propiedad), de que colaborar¨¢ con el Gobierno de Atenas y de que apoyar¨¢ la participaci¨®n del pueblo en la defensa nacional.

T¨¢ctica diferente

Hasta la primera vuelta, la intransigencia ten¨ªa un nombre, Kyprianu, y la flexibilidad dos: Clerides y Vasiliu. Pero este ¨²ltimo, consciente de que ser¨ªan los votos del todav¨ªa presidente los que decidiesen qui¨¦n hab¨ªa de ser su -sucesor, apost¨® a ¨²ltima hora, al menos en sus declaraciones, por su misma l¨ªnea en lo que concierne a la cuesti¨®n nacional. Vasiliu, no obstante, sigui¨® ofreciendo una t¨¢ctica diferente que, al menos en teor¨ªa, busca consenso por un doble camino: el de un Gobierno con representaci¨®n de todas las ideolog¨ªas pero de ning¨²n partido, una especie de meritocracia, y el de un consejo nacional (al que invitar¨ªa a Clerides, Kyprianu y Lisarides) constituido por todas las formaciones pol¨ªticas y con el ¨²nico objetivo de elaborar una pol¨ªtica de consenso destinada a lograr la reunificaci¨®n de la isla bajo una f¨®rmula federal (no confederal, como pretenden los turcochipriotas), en l¨ªnea con los acuerdos entre las dos comunidades que, con los "buenos oficios" de la ONU, se alcanzaron en 1977 y 1979.Aunque Kyprianu dej¨® a sus partidarios libertad de voto, era dif¨ªcil ayer para ¨¦stos ser totalmente sordos a los cantos de sirena de los dos candidatos. Clerides, considerado m¨¢s dispuesto a ceder en la negociaci¨®n, ha intentado llevar la batalla al campo ideol¨®gico. En los ¨²ltimos d¨ªas, y m¨¢s espec¨ªficamente en el debate televisado del jueves por la noche, trat¨® de convencer al electorado de que su rival es un caballo de Troya del comunismo.

Ciertamente, los partidarios de Kyprianu se sit¨²an en el espectro del centro-derecha, y sus diferencias con los de Cleride¨¢ son m¨ªnimas en este sentido. Pero a muchos se les pod¨ªa hacer muy cuesta arriba votar por un hombre que lleg¨® a chocar frontalmente con el m¨ªtico arzobispo Makarios (el mentor del actual presidente) y cuyo papel en los acontecimientos de1974, inmediatamente despu¨¦s del golpe fascista y progriego del pistolero Nicos Sampson, es todav¨ªa hoy muy discutido.

Entre este fuego cruzado, Kyprianu acudi¨® a votar ayer con la misma aparente frialdad que en la primera vuelta, sin dejar traslucir bajo qu¨¦ nombre pon¨ªa una cruz en su papeleta (si es que no la dejaba en blanco) y limit¨¢ndose a se?alar: "Nuestro deber es salvar la democracia a toda costa y continuar la lucha por la libertad de nuestro pueblo".

L¨¢grimas

Numerosos gritos de "estamos contigo siempre" y vanas mujeres llorando por la derrota de su ¨ªdolo parec¨ªan indicar que este viejo luchador, que ha ejercido el poder en Chipre durante los ¨²ltimos 10 a?os y medio, puede no haber quedado definitivamente fuera de juego.Los dos candidatos hablaron de unidad cuando depositaron su voto. Vasiliu, al que recibieron cientos de personas, asegur¨® que "no habr¨¢ ni vencedores ni vencidos". Clarides puso el ¨¦nfasis en un Gobierno "de unidad y reconciliaci¨®n que progrese hacia la soluci¨®n del problema nacional".

El dirigente derechista -que dos d¨ªas antes hab¨ªa anunciado la renuncia a la direcci¨®n de su partido para ser realmente un candidato de todos- gan¨® tambi¨¦n ayer la batalla de las masas. Unas 3.000 personas y unos cuantos perros, todos ellos con pegatinas, gorros y bufandas con la inscripci¨®n nai (s¨ª), lo recibieron con atosigante entusiasmo y con gritos de "nadie nos parar¨¢", "ganaremos", y "unidad". El espect¨¢culo, aunque impresionante, no era excesivamente indicativo. En la primera vuelta ocurri¨® lo mismo, y Clerides s¨®lo obtuvo el 33,32% de los votos, frente al 30,11% de su m¨¢ximo adversario.