La OMC impulsa una mayor exigencia y endurecimiento del c¨®digo deontol¨®gico de los m¨¦dicos

La Organizaci¨®n M¨¦dica Colegial (OMC) revisa actualmente su c¨®digo deontol¨®gico para ampliarlo y endurecerlo. El texto base de esta reforma censura la "tradici¨®n de tolerancia" de los colegios m¨¦dicos ante presuntas faltas, ya que "suele irse a remolque de las denuncias interpuestas por el p¨²blico y otros colegiados", por lo que "hay que aceptar que no todas las acusaciones de corporativismo son injustas". La OMC tambi¨¦n prepara un c¨®digo ¨¦tico para sus directivos, "ya que no son excepcionales las situaciones creadas por fallos ¨¦ticos de los cargos colegiales y aun de los propios colegios". La ¨¦tica m¨¦dica ha cobrado actualidad con los casos de cobayismo humano denunciados en Francia, de los que hay precedentes en Espa?a.

La Comisi¨®n Deontol¨®gica de la OMC, impulsada por el presidente colegial, Ricardo Ferr¨¦, ha promovido un debate interno sobre 18 asuntos "espinosos" para su eventual inclusi¨®n en el nuevo c¨®digo ¨¦tico de la profesi¨®n.Entre ellos figura un enfoque ¨¦tico de las publicaciones cient¨ªficas, medicinas paralelas, relaciones jer¨¢rquicas de los jefes y del personal subordinado, obligaci¨®n moral de denunciar respecto del d¨¦bil de car¨¢cter o no competente, libertad sindical, tribunal de selecci¨®n de puestos m¨¦dicos, historias cl¨ªnicas, investigaci¨®n en pediatr¨ªa, restricciones en la capacidad profesional derivadas de enfermedad, deberes corporativos, formaci¨®n continuada relaciones con la industria farmac¨¦utica y control de los gastos m¨¦dicos.

En fuentes de la c¨²pula de la OMC, cuyo presidente es Ricardo Ferr¨¦, no se ocultan las situaciones fraudulentas y conexiones de intereses que se pueden estar produciendo en terrenos como la relaci¨®n con laboratorios, la peculiar figura del visitador m¨¦dico y la supuesta ciencia que venden determinadas revistas.

La Comisi¨®n Deontol¨®gica de la OMC critica, en un texto de trabajo para la revitaflzaci¨®n de las Comisiones Deontol¨®gicas Colegiales (CDC) de los distintos colegios, la "escasa falta de iniciativa" de ¨¦stas y de las propias juntas directivas, ya que "apenas se procede de oficio" y "son muy pocas" las que sustancian, desarrollan y dirimen un expediente con "calidad suficiente".

Este plan de revitalizaci¨®n de las comisiones deontol¨®gicas tiene como ejes "levantar el ¨¢nimo" a ¨¦stas y prestarles asistencia t¨¦cnica para que pueden cumplir con competencia, sus funciones.

En este sentido se prev¨¦ una campa?a de difusi¨®n para recordar que "la jurisdicci¨®n deontol¨®gica no s¨®lo no est¨¢ amenazada de muerte, sino que a nivel de la Comunidad Europea, se afirma cada vez con m¨¢s fuerza su necesidad y su car¨¢cter insustituible".

"Baja pol¨ªtica"

Seg¨²n el texto, las denuncias han sido utilizadas como arma arrojadiza con fines partidistas. "Predominan de modo desproporcionado los casos de injurias entre colegiados, cargadas en no pocas ocasiones de connotaciones de baja pol¨ªtica, con el riesgo no demasiado remoto de convertir la Deontolog¨ªa en un arma para ajustes de cuentas, son relativamente pocos los expedientes relativos a deficiencias de calidad cient¨ªfica o humana de la pr¨¢ctica profesional".Y se admite sin ambages que muchas veces los dict¨¢menes deontol¨®gicos, una vez entregados a las Juntas colegiales, se extinguen sin dejar ni rastro, lo cual favorece un clima de indiferencia o frustraci¨®n" de las comisiones investigadoras.

Asimismo, se censura "la ignorancia deliberada de la deontolog¨ªa por un n¨²mero creciente de funcionarios no m¨¦dicos que controlan la gesti¨®n asistencial p¨²blica", y que practican una pol¨ªtica de disuasi¨®n de toda resistencia en este terreno.

No se oculta a los redactores de estos textos "que este plan para la revitalizaci¨®n de la Deontolog¨ªa m¨¦dica cobrar¨ªa a los ojos de toda la colegiaci¨®n y de la opini¨®n p¨²blica una firme credibilidad si la Asamblea de Presidentes colegiales a propuesta del Consejo General aceptase darse a s¨ª misma una Gu¨ªa de ?tica de los directivos de la OMC".

Este c¨®digo para directivos viene justificado no s¨®lo porque "no son excepcionales" sus fallos ¨¦ticos, sino porque "la carencia de normas objetivas que fijen su conducta y definan las faltas que puedan cometer dificulta mucho su evaluaci¨®n deontol¨®gica", contin¨²a el texto, que se?ala tambi¨¦n que es obvio que los directivos "est¨¢n obligados, en primer lugar, a ser ejemplares en el cumplimiento de las normas estatutarias y deont¨®logicas".

'Caso Rivera'

Cabe recordar que el anterior presidente de la OMC, Ramiro Rivera, fue condenado a cuatro a?os de suspensi¨®n de sus funciones por la Audiencia Territorial de Madrid por falta muy grave del reglamento disciplinario.La Audiencia confirm¨® que hab¨ªa disminuido la actividad en el servicio de cirug¨ªa cardiovascular del Hospital Provincial que dirig¨ªa Rivera, aunque no se prob¨® su "intervenci¨®n maliciosa" en ese descenso. S¨ª se demostr¨® que Rivera tradujo su malestar en "trasladar sus actuaciones de cl¨ªnica privada a un centro ajeno al Hospital Provincial, traspasando a este centro enfermos que estaban siendo tratados por la Seguridad Social en el hospital". Un paciente, tras esperar 45 d¨ªas a ser operado por el servicio de Rivera, abandon¨® el Hospital Provincial e ingres¨® en el Hospital Alem¨¢n donde el ex presidente de la OMC le intervino en breve plazo cobr¨¢ndole honorarios, lo que, seg¨²n el tribunal, "no deja de ser sorpresivo y constituye una falta de decoro y dignidad profesional".

La sentencia consider¨® tambi¨¦n muy grave que Rivera cambiase de horario a un subordinado para facilitar la asistencia a sus enfermos privados.