Los 'chiquitos' de la solidaridad

Los trabajadores excedentarios de las principales industrias comarcales se hallan sumidos en un largo per¨ªodo de reflexi¨®n, sin todav¨ªa tomar decisiones para vencer la certidumbre.No lo ha pensado tanto Pedro Gonz¨¢lez, de 44 a?os, casado y con cuatro hijas, que trabaj¨® durante 19 a?os en Forjas y Aceros. A lo largo de sus a?os de vinculaci¨®n a la empresa, pas¨® por el tren de laminaci¨®n, el equipo de radiograf¨ªas de piezas y el servicio de prevenci¨®n de accidentes. Con los cinco millones y pico que le correspondieron por el despido forzoso pag¨®, hace un mes, el traspaso y se hizo de la noche a la ma?ana con la explotaci¨®n del bar Delicias, que lleva incluida una vivienda familiar.

Paga 16.000 pesetas de renta al mes. Desde el mostrador, Gonz¨¢lez puede ver todos los d¨ªas desfilar delante de su establecimiento a cientos de sus compa?eros camino de las f¨¢bricas asentadas al otro lado del r¨ªo.

Una corriente de apoyo se ha suscitado en su favor por parte de sus conciudadanos. y quiz¨¢s por ello los chiquitos se convierten cada d¨ªa en abundantes y renovadas rondas de la solidaridad.

?Que si me hubiera gustado seguir en la f¨¢brica? Por supuesto. All¨ª ganaba entre 85.000 y 87.000 pesetas, primas incluidas, pero sab¨ªa que el trabajo no se prolongaba m¨¢s de ocho horas diarias y pod¨ªa programar mis vacaciones anuales. Al bar bajo a las diez de la ma?ana para salir a media noche. Pero empiezo a tener la sensaci¨®n de que mi mujer y mis hijas acaso no vayan a pasar necesidades".

Frustraci¨®n

Ochocientos setenta campurrianos menores de 25 a?os integran hoy la lista de desocupados, lo que provoca en la mayor parte de la poblaci¨®n un s¨ªndrome de frustraci¨®n. Una de las consecuencias de ello es que prefieren no abordar los sucesos de hace un a?o con los forasteros, aunque sean conocidos.

Hay un hecho harto significativo respecto del mercado de trabajo: que la oficina de promoci¨®n de empleo, que ha empezado a funcionar en el mes de enero, s¨®lo haya sido capaz de resolver el problema a dos convecinos: uno ir¨¢ a navegar y otro despacha ya vinos en una bodega.

Son las ¨²nicas ofertas de trabajo en Reinosa despu¨¦s de un a?o, as¨ª que la ansiedad que todos sienten no se ver¨¢ colmada hasta conocer los resultados pr¨¢cticos de la declaraci¨®n de Zona de Nivel 2, que garantiza a las empresas que se establezcan en la comarca subvenciones a fondo perdido de hasta el 45% del presupuesto.

Es una remota esperanza para un pueblo enfermo de escepticismo y a la espera del inmediato desarrollo del decreto a cargo del Consejo de Ministros.