La reconversi¨®n
En relaci¨®n con el editorial del pasado d¨ªa 15 de mayo sobre la reconversi¨®n industrial, La reconversi¨®n interminable, deseo realizar una puntualizaci¨®n que considero fundamental. Ni que decir tiene que respetamos pleamente el derecho de la l¨ªnea editorial a discrepar sobre posiciones defendidas por la Uni¨®n General de Trabajadores, pero ante un proceso de tantas repercusiones sociales como la reconversi¨®n naval no pueden omitirse datos que son fundamentales para la comprensi¨®n de dicho proceso.La UGT ha formulado con absoluta claridad sus planteamientos, y as¨ª, desde un principio, fij¨® como condici¨®n ineludible para.abordar cualquier plan de reconversi¨®n-el que llevara emparejado un esfuerzo de reindustrializaci¨®n en las zonas afectadas que a su vez permitiera crear puestos de trabajo alternativos para recolocar a los trabajadores excedentes incluidos en los Fondos de Promoci¨®n de Empleo.
Desde esa perspectiva, la suspensi¨®n de los contratos de trabajo ten¨ªa, frente a la rescisi¨®n, un evidente sentido cautelar en funci¨®n de la creaci¨®n de empleos alternativos.
En ning¨²n caso los acuerdos de 1984 ten¨ªan por objetivo el regreso de los trabajadores a los astilleros; por el contrario, la pretensi¨®n en todo momento ha sido su recolocaci¨®n, la cual hubiera sido posible con un proceso reindustrializador eficaz en tiempo y forma. ?ste es el punto fundamental de la cuesti¨®n: que no se ha creado el empleo prometido, entre otras razones porque el sector p¨²blico, imbuido de un a estrategia de retirada, eludi¨® realizar y o propiciar las inversiones necesarias-
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