Boltanski lleva sus obras funerarias al Reina Sof¨ªa
El artista franc¨¦s crea un montaje sobre 'El Caso'
Christian Boltanski, de 44 a?os, es un ejecutor de obras capaz de aplicar las m¨¢s variadas t¨¦cnicas art¨ªsticas para llegar a contar, las historias que a ¨¦l le interesan. Boltanski exhibir¨¢, a partir de ma?ana, jueves, una historia sobre la muerte, creada a partir del semanario El Caso, para ser expuesta en el Centro de Arte Reina Sof¨ªa, de Madrid. El montaje se compone de 40 fotograf¨ªas publicadas en 1986, cajas de galletas, estantes de pino y s¨¢banas.
Como pintor, la trayectoria art¨ªstica de Boltanski ha estado ligada a movimientos internacionales como el pop art, minimal art o el arte povera, pero la suya ha sido una trayectoria personal en la que ha intentado sumar algunos elemento de estas formas, de expresi¨®n junto a resortes propios. Esta evoluci¨®n no ha sido ajena a la b¨²squeda de los materiales m¨¢s adecuados a las historias que ¨¦l quer¨ªa contar. As¨ª, partiendo de la pintura, ha pasado por la fabricaci¨®n de objetos, la escritura o el cine, hasta llegar a la fotograf¨ªa, aut¨¦ntico soporte ole sus montajes actuales.La exposici¨®n, titulada El Caso, que Boltanski exhibe en Madrid, ocupa tres peque?as salas. "Este museo me pareci¨® un 'lugar ideal", explica Boltanski, "para hacer mi montaje, porque antes el museo ha sido un hospital en el que ha sufrido y muerto mucha gente".
Con ese clima favorable para su historia, Boltanski seleccion¨® alrededor de cuarenta fotograf¨ªas publicadas en el semanario El Caso durante 1986 y parte de 1987. Las fotos -primeros planos en blanco y negro- han sido colocadas en las paredes. Bajo cada una de ellas hay una lata de galletas en cuyo interior est¨¢ la instant¨¢nea tomada del cad¨¢ver tal como fue encontrado. Una de las paredes de la sala est¨¢ ocupada por una gran estanter¨ªa realizada con madera de pino.
Las baldas est¨¢n ocupadas por s¨¢banas dobladas, tal como se puede ver en muchos hospitales. Las dos habitaciones que rodean la sala central exhiben sombras que pretenden ser ¨¢ngeles de la muerte y ¨¢nimas en el purgatorio.
Monumentos
Con todos estos elementos, Boltanski cuenta que ha querido hacer un monumento a la muerte. "No un monumento en m¨¢rmol, sino algo ef¨ªmero como la vida, hecho con materiales ef¨ªmeros. Cuando alguien entra aqu¨ª, no sabe qu¨¦ es lo que va a encontrar. Al ver las fotos puede imaginar la historia de estas personas, historias que son las de todos, muy pr¨®ximas a las del visitante"."De todas formas", advierte Boltanski, "la obra de arte es algo casi imposible de explicar. Es un mundo de sugerencias para el que la contempla. Cada cual debe hacer su propia interpretaci¨®n. Nunca hay una sola lectura, sino muchas; depende de qui¨¦n la haga".
Ya en sus primeras obras, Boltanski tocaba la idea de la muerte al reflejar a ni?os desaparecidos. Los campos de concentraci¨®n nazis han sido tambi¨¦n motivos de muchos de sus montajes. ?Por qu¨¦ ha elegido el tema de la muerte? "Los temas universales que el artista puede tratar no son m¨¢s de cuatro. La muerte es algo que, inevitablemente, nos afecta a todos y que ha sido abordado por infinidad de artistas. ?Por qu¨¦ no trabajar sobre el tiempo que desaparece, sobre la muerte que todo lo limita?".
Los monumentos funerarios de Christian Boltanski son para este artista algo tan radical y ut¨®pico como intentar sobrevivir a la muerte, una forma ¨²ltima de rebeld¨ªa para luchar contra lo inevitable. No cree Boltanski que sus montajes sean especialmente sombr¨ªos ni que el visitante pueda salir angustiado tras observar las fotograf¨ªas de los muertos. "El impacto del p¨²blico depende de qui¨¦n sea el que observa la obra. El mundo interior de la persona que mira transforma lo que tiene delante. Lo ef¨ªmero, como la vida en contraposici¨®n con lo definitivo de la muerte, es algo que, de todas formas, tiene que impactar".
Babelia
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