Mar¨ªa Pallais
Una digna aunque inocente sucesora de Mata Hari
No sab¨ªa Mar¨ªa Pallais si sonre¨ªr o salir corriendo el d¨ªa del mes de mayo en que el ministro del Interior de Nicaragua, el comandante Tom¨¢s Borge, anunci¨® en un mitin en la ciudad costera de Yulu que ella hab¨ªa actuado como agente doble, infiltrada en la CIA a las ¨®rdenes del servicio secreto sandinista. O su trabajo de esp¨ªa durante 15 a?os de vida en Nueva York hab¨ªa sido tan secreto -pens¨®- que ni ella misma se hab¨ªa dado cuenta, o el comandante hab¨ªa hecho una interpretaci¨®n un tanto cinematogr¨¢fica de las andanzas de una inocente periodista nicarag¨¹ense por tierras norteamericanas.
Ciertamente, Mar¨ªa Lula Pallais Checa ha acumulado a sus 35 a?os de edad m¨¦ritos m¨¢s que suficientes para ser una digna sucesora de Mata Hari. A su belleza magn¨¦tica a?ade requisitos tan indispensables como curriculum familiar -es sobrina de Anastasio Somoza e hija de Noel Pallais, primo e ¨ªntimo colaborador del dictador-, amplio abanico de contactos de alto nivel en varios pa¨ªses, incontenibles deseos de aventura y excelente dominio del ingl¨¦s.As¨ª lo debi¨® de pensar la mujer que hace dos a?os intent¨® en Nueva York una aproximaci¨®n personal a Mar¨ªa en nombre del FBI. Compartieron mesa en un par de restaurantes y algunos paseos por Central Park, pero Mar¨ªa le dej¨® claro desde un principio que su vocaci¨®n no era la de traicionar a su pa¨ªs. No fue sandinista antes de la revoluci¨®n ni pertenece a ninguna organizaci¨®n en estos momentos, pero Mar¨ªa cree tener su coraz¨®n del lado del actual r¨¦gimen nicarag¨¹ense. En funci¨®n de esas simpat¨ªas, Mar¨ªa Pallais sol¨ªa compartir con dirigentes sandinistas las experiencias y las noticias a las que ten¨ªa acceso por su trabajo como corresponsal en las Naciones Unidas de un diario peruano, su tierra natal. "Yo era consciente de que mis informaciones podr¨ªan ser utilizadas por la seguridad nicarag¨¹ense, pero nunca trabaj¨¦ profesionalmente para ellos", asegura en Managua.
De esto mismo trat¨® Mar¨ªa de convencer en el mes de abril a los agentes norteamericanos que la interrogaron durante un d¨ªa entero en las oficinas del FBI en Nueva York, adonde hab¨ªa regresado, despu¨¦s de dos meses de cambiar su residencia a Nicaragua. Acudi¨® a la cita enga?ada por la llamada de su amiga del FBI, que le ped¨ªa verla. En lugar de la amiga, aparecieron un hombre y una mujer que se identificaron como funcionarios de la misma Oficina Federal de Investigaciones. Tras ser acusada de sofisticadas actividades de espionaje, fue dejada en libertad sin cargos.
De regreso a Managua, Mar¨ªa acudi¨® en busca de consejo al despacho de su amigo el comandante Borge, quien le prometi¨® hacer algo. Y lo hizo. Con el af¨¢n de proteger su vida, decidi¨® que lo mejor era aumentar la dimensi¨®n del asunto y darle a Mar¨ªa relieve de hero¨ªna nacional. "Agente sale ilesa de filas enemigas", public¨® el diario Barricada al d¨ªa siguiente del discurso de Borge en Yulu.
Todos sus amigos y enemigos se pusieron entonces a recordar, con cierto morbo, cuando ella traslad¨® al Gobierno nicarag¨¹ense un mensaje de Ed¨¦n Pastora especularon sobre su trabajo en la agencia AP, en la cadena CBS, sobre sus relaciones sentimentales con el ex primer ministro de Per¨² Manuel Ulloa. Y, en definitiva, consiguieron complicar la vida de Mar¨ªa, para quien los objetivos prioritarios son terminar un libro sobre Nicaragua e investigar la muerte de su hermano Marcel, un destacado sandinista asesinado en extra?as circunstancias.
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