Una, juez investiga si hay responsabilidad penal en el encierro de una joven autista
La juez titular del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 2 de Igualada (Barcelona), Sonia de los Santos, investiga si existen responsabilidades penales en el encierro en condiciones infrahumanas de Mar¨ªa Antonia Marim¨®n, una joven de 25 a?os que padece graves trastornos ps¨ªquicos y ha permanecido durante tres a?os encerrada en una habitaci¨®n sin ventilaci¨®n, desnuda y rodeada de suciedad.
Mar¨ªa Antonia Marim¨®n se encuentra internada, por orden de la juez, en el psiqu¨¢trico de Martorell, donde se le ha apreciado una total incapacidad para cuidarse o relacionarse con los dem¨¢s. Hace cinco a?os, sin embargo, Mar¨ªa Antonia Marim¨®n era una joven normal que estudiaba idiomas y secretariado.Su equilibrio ps¨ªquico comenz¨® a deteriorarse cuando, por causas a¨²n desconocidas, la joven cay¨® en una profunda depresi¨®n, a causa de la cual tuvo que ser sometida a un tratamiento psiqui¨¢trico. La medicaci¨®n, sin embargo, no surti¨® efecto, seg¨²n ha relatado su padre, de profesi¨®n contratista. Al poco tiempo de haber presentado los primeros s¨ªntomas de depresi¨®n, la joven comenz¨® a mostrar inclinaci¨®n al aislamiento y trastornos de conducta que fueron agrav¨¢ndose hasta derivar en un comportamiento cada vez m¨¢s agresivo.
Los padres no supieron afrontar la situaci¨®n de otro modo que encerrando a la joven en una habitaci¨®n interior de la casa, situada en la Rambla de Sant Ferran, de Igualada, de reducid¨ªsimas dimensiones. Nadie entre el vecindario la ech¨® de menos. Nadie denunci¨® su ausencia. La joven ha vivido en ese cuchitril durante tres largos a?os en condiciones infrahumanas.
El encierro y la falta de cuidado han agravando su trastorno ps¨ªquico, hasta culminar en un autismo total. Tambi¨¦n ha sufrido un grave deterioro f¨ªsico. Fue su propio padre quien, en vista del lamentable estado en que se encontraba su hija, lo comunic¨® a una asistente social, quien denunci¨® el caso en el juzgado.
Cuando, previa orden judicial, los agentes de la Guardia Civil entraron en la habitaci¨®n, encontraron a una mujer de apariencia salvaje, que llevaba a?os sin cortarse ni el pelo ni las u?as, desnuda, entre; restos de comida y excrementos. El hedor era, seg¨²n el testimonio de quienes la rescataron, insoportable. La joven les recibi¨® a mordiscos y tuvo que ser reducida mediante sedantes y una, camisa de fuerza. Cuando los agentes la conduc¨ªan al veh¨ªculo, la madre, aquejada de una leve deficiencia mental, gritaba desde la puerta: "No se la lleven, por favor, no la fusilen, que ya se morir¨¢ ella sola, pobrecita m¨ªa".
Incomunicaci¨®n
El prolongado encierro ha provocado a Mar¨ªa Antonia Marim¨®n un trastorno mental muy grave, seg¨²n ha declarado a Efe el doctor Jes¨²s S¨¢nchez de Vega, subdirector del Psiqui¨¢trico de Martorell. La joven presenta una gran desorganizaci¨®n ps¨ªquica y ni siquiera reconoce las cosas que la rodean.Sin embargo, desde que fue internada, no ha presentado en ning¨²n momento muestras de agresividad y cuando se le inquiere, contesta, aunque apenas con monos¨ªlabos. Poco despu¨¦s de ser ingresada recibi¨® la visita de su padre. A pesar de su profunda incomunicaci¨®n, la joven ha sido instalada junto a otros enfermos mentales. Los m¨¦dicos consideran que con tiempo y un tratamiento adecuado puede llegar a recuperarse parcialmente.
La juez ha solicitado al hospital un informe completo sobre su estado mental, as¨ª como las causas que lo han provocado, para determinar si existen responsabilidades penales. El hospital investiga tambi¨¦n qu¨¦ tipo de tratamiento psiqui¨¢trico recibi¨® antes de ser encerrada y en qu¨¦ centros fue atendida.
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