Boadella ecologista
TVE-2 en Catalu?a ofreci¨® el pasado mi¨¦rcoles la presentaci¨®n de la serie Som 1 meravella, seis cap¨ªtulos sobre "la problem¨¢tica actual de Catalu?a" en clave de humor -"entre la iron¨ªa y el sarcasmo"- presentada y dirigida por Albert Boadella. Antes, la misma TVE-2 nos hab¨ªa largado, desde Quito, la Misa de la Hispanidad, un buen e inesperado pr¨®logo para la serie de Boadella, en la que el director, repantingado en una butaca y junto a una imagen de la Pilarica, nos hablaba de Silvania, una de las 41 comarcas catalanas que aquel mismo d¨ªa -festividad de la Raza- cumpl¨ªa un a?o de su independencia, motivada, al parecer, por su peculiar manera de bailar la sardana y por las nada habituales caracter¨ªsticas de su cocina. Silvania, 12 kil¨®metros cuadrados de extensi¨®n, dividida en 26 comarcas de 780 habitantes cada una, de religi¨®n cat¨®lica reformista silvanesa y regida por el Molt respectable Ramon Barniols, parec¨ªa, en labios de Boadella, un guiso capaz de superar en inter¨¦s la nada despreciable homil¨ªa del arzobispo ecuatoriano sobre. el Descubrimiento.Sin embargo, la cocina del juglar nos dej¨® esta vez un tanto insatisfechos. Lo mejor, sin duda, es la co?a que Boadella hace del S¨®m 6 mil.lions cuyo logotipo conserva y transforma en el espriuano Som 1 meravella (Espriu, a trav¨¦s de uno de sus personajes, se limitaba a repetir, una y otra vez: som els milliors). Luego, tras la sorpresa de escuchar a un mosso d'esquadra hablar en castellano -relativa sorpresa, claro est¨¢- y a un guardia civil en correcto catal¨¢n, Boadella nos introduce en una Catalu?a rodeada de humos de f¨¢bricas benefactoras, humos de un alto nivel espiritual que la cultura catalana toma peri¨®dicamente -como anta?o tomaba las aguas-, con el riesgo, como en el caso de los se?ores Ib¨¢?ez Escofet y Baltasar Porcel, de que esos humos els hi pugin al cap.
F¨¢cil y agradecido
Estamos, pues, en el terreno del chiste f¨¢cil y agradecido, lejos del Boadella corrosivo e iconoclasta -a pesar de la Pilarica y el cabezudo Pujol que, c¨®mo no, hace su aparici¨®n- que era de esperar. Am¨¦n de las alusiones, cari?osas alusiones, a Ramon Barnils (Barniols), que gran parte del p¨²blico no pillar¨¢, como no pillar¨¢ la que Boadella hace a Miquel Sallares (Sellares), siguiendo con ese aire facil¨®n y sumamente agradecido, hay que destacar la parodia que un joglar hace de Manuel Luque y la que, otro joglar, Angelet, hace -para m¨ª lo mejor del programa, junto con la descripci¨®n de Silvania- del espacio Bona cuina, una parodia que f¨¢cilmente hubiese firmado la redacci¨®n de la entra?able revista Hara-Kiri.Por el momento, ese Boade?la ecologista, rodeado de humos exquisitos y chistes f¨¢ciles -que son los mejores, o, al menos, los m¨¢s jaleados-, nos sabe a poco. Esperemos que en sucesivos episodios se anime la cosa.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.